Aprender haciendo: Medac llega a Córdoba

¿Puede alguien aprender a jugar a través exclusivamente de indicaciones en una pizarra? Quizá alguien piense que sí. Pero prueben otro modo: denle el balón en las manos y una cancha donde poder tomar decisiones. Del modelo impositivo al ejemplo inspirador. Y siempre con la práctica como vía principal para el aprendizaje. Ese es el ingrediente básico del método de Medac, un Instituto Oficial de Formación Profesional privada con más de 2.500 alumnos repartidos por toda la comunidad andaluza que ahora desembarca en Córdoba.

“Estudia lo que te gusta y no tendrás que estudiar ni un día de tu vida. Estarás siempre aprendiendo, adaptado y, lo más importante: ¡Serás feliz!”. Este lema, que forma parte principal del ideario del centro, lo firma Paco Ávila, consejero delegado de Medac. Málaga -donde están las raíces-, cuenta con tres centros. Granada (2) y Almería (1) ya están dentro  de la red. En el próximo curso 18-19, Medac abrirá sus puertas -en la calle Escritora Ángeles López de Ayala, 7, aledaño al centro deportivo Open Arena- en la capital cordobesa. Se llega así a buen puerto después de dos años trabajando para poder añadir a Córdoba al plan de expansión de este Instituto Oficial de Formación Profesional.

“Desde el principio Córdoba nos ha recibido con los brazos abiertos. De hecho, en

nuestras líneas deportivas de Formación Profesional hemos generado una alianza

estratégica con una instalación referente en Córdoba como es Open Arena. Estamos muy agradecidos a su dirección, sabiendo que es una empresa de capital 100% cordobés, por el interés y la acogida tan buena que han tenido con nosotros abanderada por José Medina“, expresa Ávila.

Medac, un centro de estudios oficiales de FP homologado por la Junta de Andalucía y avalado por la Universidad Isabel I, llega a Córdoba para “revolucionar la formación profesional”, según sus impulsores, a través una metodología con sello propio y “dirigida a adquirir competencias que permiten entrar en el mercado laboral”. Ocho de cada diez alumnos consiguen hacerlo, un dato que avala el éxito de una propuesta educativa muy conectada con el universo del deporte y sus valores. No es extraño que así ocurra. Uno de sus socios fundadores es Javier Imbroda, un nombre de referencia en el baloncesto español que ocupa el cargo de presidente institucional de Medac. Miguel Reinoso, como director general, y Paco Ávila -consejero delegado- completan el grupo fundacional en Málaga de una escuela que en Córdoba nacerá bajo la dirección de Elías Cabrera.

Del valor de la FP para abordar los desafíos que marca el mundo laboral en la actualidad no tiene ninguna duda Paco Ávila, quien asegura que “la formación profesional nunca ha sido de segunda pero actualmente en el siglo XXI mucho menos. Es una primera opción. Tenemos que quitarnos la caspa heredada de épocas anteriores, cuando se entendía que a ella accedían personas que no eran buenos estudiantes. Nunca lo fue y ahora menos. De hecho, se demuestra con los altos grados de empleabilidad en la formación profesional y, en especial, en las formaciones que nosotros desarrollamos”. En el próximo curso académico se implantarán en las titulaciones oficiales de Tafad (Técnico Superior en Animación y Actividades Físicas y Deportivas), Auxiliar de Enfermería, Teco (Técnico en Conducción de Actividades en el medio natural), Dietética, Educación Infantil, Higiene Bucodental, Farmacia y Parafarmacia. Este “trasatlántico formativo” creará más de 50 puestos de trabajo directos en nuestra ciudad.

“Además, hay un dato muy importante que destacar: existe una correlación directa entre el número de alumnos en los países desarrollados que deciden estudiar formación profesional y la reducción del paro juvenil”, expresa Ávila, quien recalca que “hay un reto nacional de potenciar la FP”, pero se debe “hacer con mucha cautela y sentido común”. La clave reside en “desarrollar e impartir aquellas formaciones que mayor grado de empleabilidad y prestación tienen en el mercado, así como con la adaptación de los contenidos a la realidad, que está evolucionando y madurando a una velocidad mucho mayor que los currículums académicos. Eso no lo podemos permitir porque está generando un gap en el que estamos formando gente con técnicas antiguas”.

El reto de Córdoba: “Es una gran oportunidad”

A Elías Cabrera, una persona estrechamente vinculada al deporte en todas sus facetas -como practicante activo, entrenador, directivo...-, el proyecto de Medac Córdoba le resulta “apasionante”. La apertura académica está prevista para el curso 18-19, aunque se espera que antes del próximo verano esté todo dispuesto “para atender a las familias y a los futuros alumnos”, indica Cabrera, quien recalca que Córdoba ha sido para Medac “un punto estratégico para la expansión de la empresa”, por lo que los objetivos son “altos”.

“Dar a Córdoba como sociedad y a las familias la oportunidad de una enseñanza de estas características, para que tantos jóvenes encuentren en la formación profesional el camino para su realización personal y la inserción en el mundo laboral o el camino alternativo para aquellos que tengan proyección universitaria, es algo que ya deja intuir los hitos y objetivos tan importantes y ambiciosos que Medac se marca”, expresa el director del centro, que busca en la ciudad “lo que ya ha conseguido en Málaga, Granada o Almería: ser el referente de la Formación Profesional en Andalucía”.

Elías Cabrera apunta que Córdoba “está necesitada de proyectos como el de Medac” y lo dice desde un convencimiento: “Conozco la ciudad, conozco el deporte y la fuerza y los valores educativos que posee, pero también conozco mucho la realidad de los jóvenes, muchos de ellos desorientados y familias que realmente no encuentran solución para la formación de sus hijos”. Y ahí la FP cobra un rol relevante. “Es una opción excelente de futuro”, expresa Cabrera, que acentúa el sello propio de un centro que tiene sus orígenes en el mundo del deporte y que “lleva intrínsecos en su filosofía de empresa los valores de éste: la humildad, el esfuerzo, la actitud, el sacrificio... Valores que todos dentro de la familia Medac sentimos como propios y exponemos a nuestros alumnos y a las familias como un aspecto diferencial”.