El mejor partido juvenil posible, el derbi eterno
El Séneca da un paso hacia el retorno a la División de Honor a costa del Córdoba (3-1)
Un Séneca-Córdoba nunca es un partido más. Es cierto que cada temporada hay un buen puñado de derbis: los dos clubes se cruzan un par de veces en cada categoría, desde que los chavales tienen seis o siete años hasta los dieciocho. Hay muchos partidos del siglo cada año. Y se viven con pasión -a veces desbordada, incluso en el peor de los sentidos- en el campo y en la grada. Lo más frecuente es que los puntos tengan trascendencia para decidir el destino de los títulos. Así viene siendo desde hace décadas. El Córdoba-Séneca es un duelo eterno. Pero hay derbis, que son muy pocos, en los que se pone en juego algo más que el orgullo y la tradición. Incluso más que la posibilidad de ganar un título. El de este último domingo en el Enrique Puga ha sido uno de ellos. El legendario campo acogió el mejor partido que se puede ver en la actualidad en Córdoba en categoría juvenil. Un Séneca-Córdoba de la jornada 21 de Liga Nacional Juvenil. Lo de ser campeón o segundo es lo de menos. El objetivo es ascender al campeonato que marca el máximo nivel en juveniles, la División de Honor, de la que ambos descendieron en uno de los cursos más aciagos que se recuerdan en el fútbol de cantera cordobés.
Siempre estuvo uno. O los dos. En la División de Honor no faltó representación cordobesa desde hace décadas. Desde este campeonato se proyectan los mejores talentos, que saltan al profesionalismo sea aquí o en donde les den un buen contrato. Al Córdoba no es necesario que le cuenten lo que supone tener un buen equipo en la División de Honor. El último que dejó huella, hace tres años -llegó a los cuartos de final de Copa-, tenía en sus filas a Fede Vico, Sillero, Bernardo... La mayor parte de jugadores del filial de Segunda B han pasado por ahí. En el primer equipo también hay algunos. Con su actual estructura (un Segunda con aspiraciones de Primera; un Segunda B con el reto de la permanencia), al Córdoba le interesa contar con un vivero de jugadores en la División de Honor para nutrir a los escalafones superiores. Y en ello está, aunque la tarea no le está resultando fácil. Ente otras razones porque el Séneca, su vecino más incómodo, le está comiendo el terreno de una manera clara.
Separados por seis puntos en la clasificación, rojinegros y blanquiverdes midieron sus fuerzas en un partido que confirmó que los del Puga andan mejor. Se adelantó el Córdoba por mediación de Juan, que transformó a los diez minutos un discutido penalti. Del mismo modo -con una pena máxima rodeada de controversia- igualó el Séneca en la segunda parte gracias a Álvaro Sierra. A partir de ahí, los de Paquito estuvieron más finos. El Córdoba trató de hacer daño, pero le faltó acierto. Y en los últimos diez minutos los senequistas le dieron la vuelta al partido. Luque, en el minuto 80, y Almirón, en el último, pusieron su firma a los goles que dejaron el marcador en un definitivo 3-1. ¿Definitivo para el ascenso? Aún faltan trece jornadas, pero este tanteo condiciona el camino para ambos. El Séneca le lleva ya nueve al Córdoba, más el coeficiente particular. No resultaría muy prudente conformarse con estar por encima del adversario más clásico.
Hay hasta ocho equipos que pelean, con opciones que van desde las excelentes hasta las razonables, por las dos primeras plazas que dan el billete para la División de Honor en el curso 14-15. El Séneca es el líder en solitario, con 44 puntos sumados en 20 partidos. Tiene a tres de distancia al Atlético Sanluqueño (41) y a cinco al Sevilla (39), aunque los de Nervión tienen un partido menos jugado. San José (36), Betis (35), Córdoba (35), San Juan (33, un partido menos) y Dos Hermanas (32, un partido menos) configuran el batallón de candidatos a subir.
Después de la jornada, al Séneca se le abre un panorama más que interesante. Aún tendrá una serie de partidos ante rivales directos, pero tras el arranque del año sale muy reforzado. Para el Córdoba de Salvador Hermán, la cuestión está más dura. Cuenta con jugadores de talento para remontar la situación. Que los dos vuelvan a División de Honor será complicado, aunque entra dentro de lo posible. Sería bueno para el fútbol cordobés que al menos uno terminara dando el salto. De momento, los derbis tuvieron color rojo y negro (0-1 en la ida, 3-1 en la vuelta).
El domingo 2 de febrero se disputó el Séneca-Córdoba de más alto rango posible. En Liga Nacional. Que haya sido el último en mucho tiempo será una cuestión que se tendrá que dilucidar en el mes de mayo. El Séneca formó con José Rodríguez, Álvaro Sierra, Juanca, Álvarez, Josema, Jaime (Cañadas, 60'), Iván (Muñoz, 86'), Franco, Luismi (Luque, 54'), Almirón y Kiko (Miguel, 74'). En el Córdoba se alinearon: Izquierdo, Castro, Manu Romero, Toni, Fran, Rafa Muñoz, Juan (Miguel Sanz, 82'), José Antonio González, Chechu Córdoba, Sergio García (Barto, 77') e Iván Martos (Sergio Domínguez, 71'). Apunten estos nombres. Síganles la pista. Quién sabe cuándo se volverá a disputar otro derbi local en juveniles.
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