Cerradura cambiada y sin apenas enseres: así se ha encontrado su casa una pareja de Córdoba al llegar de vacaciones
Cuando Nuria (nombre ficticio) y su marido volvieron de vacaciones el pasado 30 de agosto, jamás pensaron que se verían en una situación tan delicada e increíble: una persona o un grupo había entrado en su vivienda, en Valdeolleros, había cambiado la cerradura y la había desvalijado. La Policía Nacional ya ha detenido a una persona y no se descarta que haya más personas implicadas en esta usurpacion y allanamiento de morada.
La afectada cuenta a Cordópolis su caso desde el anonimato con el objetivo de “concienciar a la gente para que tenga en regla todos los, papeles relacionados con su vivienda”. Lejos del discurso que sostiene con rotundidad la “facilidad” que tienen los ocupas para permanecer en una vivienda, Nuria -abogada de profesión- afirma que la realidad no es esa cuando la vivienda se trata de “tu primera, tu segunda e, incluso, tu tercera residencia”.
Todo ocurrió cuando el pasado 30 de agosto regresó a su casa. Introdujo su llave pero no entraba así que llamó a su hija pensando que se había equivocado de llave. Cuál fue su sorpresa cuando la puerta tampoco se abría. Fue entonces cuando decidió llamar a un cerrajero, quien le confirmó que la cerradura había sido cambiada. Una vez certificada que la vivienda era propiedad de Nuria, el cerrajero procedió a la apertura de la puerta. “En ese momento, de una forma muy agresiva, alguien habló desde dentro asegurando que iba a llamar a la policía”, explica.
Para ese momento, la Policía Nacional ya se encontraba en las inmediaciones de la vivienda, a donde accedió, deteniendo al hombre tras oponer una gran resistencia. Una vez arrestado, la mujer pasó al interior de su casa. Estaba desvalijada: solo estaban los electrodomésticos, la cama de matrimonio y la mesa con la televisión. Todo lo demás había desaparecido, incluidos todos los enseres personales, lo que más lamenta Nuria, quien lleva 25 años viviendo en su casa.
Su caso ya está en los juzgados. La ocupación de su vivienda tuvo que producirse hacia finales de agosto, estima la mujer, momento en el que había muy pocos vecinos en el edificio. Los que sí estuvieron “afirman que no vieron ni escucharon nada” aunque un vecino sí ha reconocido que vio una furgoneta aparcada en la acera y que “le llamó la atención”. Ahora la investigación tendrá que determinar si ese vehículo fue el que se usó para desvalijar la casa y si el detenido, que pasó a disposición judicial, es el único implicado en este delito de usurpación de vivienda.
0