Ilusión infantil de Domingo de Pasión en Franciscanos

La imposición de la ceniza marca el inicio de la Cuaresma. A ocho días de su inicio el Pregón sirve para vislumbrar la Semana Santa. Sólo unas horas después otro anuncio se produce. Es el que realiza el alumnado del colegio Santa María de Guadalupe, o de Franciscanos popularmente, con su tradicional procesión. Ocurre desde hace años en Domingo de Pasión, a nada, por así decirlo, de que las campanas de la Real Parroquia de San Lorenzo Mártir llamen a la jornada de Ramos.

El momento llegó este domingo, cuando de nuevo las puertas de la parroquia de Santa María de Guadalupe, a la que se adscribe la escuela, se abrieron de par en par con la ilusión de los más pequeños. Fue en torno a las cinco de la tarde cuando la entrañable estación arrancó en el barrio de Levante. Cabe recordar que la actividad cuenta con el respaldo de la franciscana hermandad de la Soledad, incluso desde antes de que ésta se trasladara desde Santiago Apóstol.

Como es costumbre dos imágenes recorrieron las calles próximas al templo y el anexo colegio. En primer lugar fue portado en un pequeño paso de andas una talla de Jesús Nazareno. La segunda titular de la procesión volvió a ser una Dolorosa, también en un trono adecuado para ser llevado por niños y niñas de Franciscanos. Por supuesto, no faltaron las marchas. Un año más el acompañamiento corrió a cargo de la Agrupación Musical Nuestro Padre Jesús de la Fe en su Sagrada Cena.

Decenas de estudiantes de distintas edades, aunque en todo caso de Primaria y más tempranas, formaron un cortejo que gozó de toda representación. Mantillas o hábitos franciscanos compusieron también una comitiva que, de nuevo, advirtió entre sonrisas que los días de Pasión están muy próximos. Aunque ésta no fue la primera procesión que vaticinó el cercano inicio de la Semana Santa, ya que desde 2019 el sábado previo al de Pasión es de Bondad en La Fuensanta.