El futuro de los cedidos: ¿retorno o nueva salida?
Una de las primeras tareas de Emilio Vega será decidir qué sucede con los jugadores prestados por el Córdoba | Todos acabaron el curso salvo Adri Cuevas, que lucha por el ascenso con el Hércules
Unos corrieron mejor suerte que otros. Incluso hubo quien completó un viaje extremo de la gloria de un ascenso, el que consiguieran la mayoría de ellos hace menos de un año con el Córdoba, al infierno de un descenso. Fue a Bernardo al que le tocó vivir la cara más amarga del fútbol lejos de El Arcángel: vivió en primera persona la caída del Racing a Segunda B. El canterano es sólo uno de los siete futbolistas que salieron del conjunto califal en calidad de cedidos, ya fuera el pasado verano o en el mercado de invierno. También estuvieron los especiales casos de Samu de los Reyes y Arturo, que atravesaron un doble préstamo: el primero comenzó el curso en el Lugo y el segundo en el Alcorcón para terminar ambos en el Llagostera. Sea como fuere, terminado este domingo el campeonato de Segunda A, todos aguardarán ahora la posible llamada del club blanquiverde. Para eso, aún le resta al menos una semana a Adri Cuevas, que en la actualidad lucha por el salto a la categoría de plata con el Hércules.
Lo cierto es que el final de la temporada en Segunda A abre la posibilidad de realizar balance de los jugadores que el Córdoba mantuvo cedidos en seis equipos distintos. Uno de ellos allende las fronteras de España. Es el caso de Carlos Caballero, que salió de la escuadra califal en el mercado invernal con rumbo a Grecia, donde militó en el Veria. En el conjunto heleno se reencontró el centrocampista con Raúl Bravo, pero no logró encontrar la regularidad que buscaba. Sobre su continuidad, así como la de sus compañeros, tendrá que decidir en próximas fechas Emilio Vega. Aunque el primer paso que todavía debe de dar el director deportivo blanquiverde es la contratación del nuevo técnico, el que habrá de dirigir al equipo en el pretendido camino de retorno a Primera, una decisión que se puede conocer en cuestión de horas. El leonés, con la opinión del entrenador, tendrá que resolver cuáles de los futbolistas a préstamo en otras escuadras formarán parte del proyecto cordobesista y cuáles no.
Xisco (Mallorca). El delantero, que salió del Córdoba en el mercado invernal con sólo un gol marcado en la primera parte de la temporada y escaso protagonismo dentro del terreno de juego, completó una gran segunda vuelta en el Mallorca. En la isla, logró unos guarismos más ajustados a las expectativas que su participación en un equipo puede generar. Disputó 16 encuentros, todos ellos como titular y 12 completos, y llevó su cuenta anotadora a los nueve tantos. Su recuperado olfato goleador sirvió de ayuda al conjunto balear en la consecución de su permanencia en Segunda A. De hecho, al club bermellón le gustaría contar con sus servicios la próxima campaña, si bien su elevada ficha es un escollo. El otro es que Carlos González no está dispuesto a reforzar a un rival que quizá en su tercera campaña en la categoría de plata pueda ser directo.
Adri Cuevas (Hércules). Es otro de los futbolistas cedidos por el Córdoba que realizó, y realiza, un buen papel en su equipo de turno y es el único que todavía sigue en plena competición. Estas semanas lucha por el ascenso a Segunda A con el Hércules, que este domingo se impuso en la ida de la segunda ronda al Cádiz (2-1). El jerezano jugó la totalidad de ese encuentro, como disputó antes 22 partidos de Liga, otro de Copa y dos más de play off, la mayoría como titular. Marcó cinco goles y sus guarismos serían mejores de no haber sido por una lesión que le mantuvo alejado del campo un tiempo significativo.
Fran Cruz (Alcorcón). La temporada del canterano fue mucho más discreta que la de sus compañeros. El central no gozó de la confianza de Pepe Bordalás y su paso por el Alcorcón se reduce a 12 participaciones en Segunda A y otra en Copa, la mayoría de ellas como titular. Es decir, disputó muchos menos encuentros que el pasado curso con el Córdoba, que decidió cederle a un conjunto con aspiraciones de luchar por el play off para que se curtiera de manera definitiva antes de recuperar un lugar en El Arcángel. Ni al club ni al jugador le funcionó la fórmula y ahora Emilio Vega habrá de resolver si el zaguero vuelve a tener cabida o no dentro del cuadro califal en un proyecto con un objetivo que no le resultaría desconocido. No en vano, fue partícipe del ascenso blanquiverde a Primera la temporada 2013-14.
Bernardo (Racing de Santander). El más joven de los hermanos y de los siete cedidos por el Córdoba atravesó una situación similar a la de Fran. Cumplió el sueño de participar en el retorno a Primera del Córdoba y salió semanas después para crecer antes de continuar su trayectoria con la elástica blanquiverde. Cambió el orden de los colores y vistió de verdiblanco con el Racing. Aunque tampoco contó con demasiados minutos, sí tuvo más que el otro Cruz: jugó 16 partidos, 13 de ellos como titular y nueve completo. Lo peor, sin lugar a dudas, el descenso que le tocó vivir con el cuadro de El Sardinero -lo sufrió desde el banquillo-.
Samu de los Reyes (Llagostera). El sevillano es uno de los dos futbolistas que vivió una doble cesión esta temporada, ambas en Segunda A. Salió del Córdoba en busca de regularidad y no la encontró en el Lugo, donde en la primera vuelta del curso sólo jugó dos partidos y otros dos de Copa. Su testimonial participación con los gallegos fue una invitación a cambiar de destino, algo que hizo en el mercado de invierno. Tomó rumbo al Llagostera y en el conjunto catalán sí gozó de minutos: disputó un total de 18 encuentros, todos como titular y hasta el pitido final. Cerró positivas actuaciones y quizá la puerta de El Arcángel vuelva a estar abierta para él.
Arturo (Llagostera). Compartió situación especial y vestuario con el lateral. La primera parte del campeonato resultó negativa para sus intereses, ya que apenas jugó dos partidos y otro de Copa con el Alcorcón de Bordalás, en el que contó aún con menos confianza de Bordalás que Fran Cruz. Así, en el mercado de invierno salió con rumbo al Llagostera, donde participó en 17 partidos. El último de ellos, el de este domingo, en el que los catalanes se impusieron por 2-4 al Valladolid. Marcó un tanto, el único que anotó en toda la campaña. Su escaso olfato goleador puede ser un condicionante de peso a la hora de que Emilio Vega resuelva sobre su futuro en el Córdoba, con el que tiene dos años más de contrato.
Carlos Caballero (Veria, Grecia). El madrileño consiguió superar su gravísima lesión justo cuando Albert Ferrer, quien confiaba en contar con él a partir de ese momento, terminó su etapa en el banquillo del Córdoba. Sufrió alguna leve recaída y apenas jugó con la elástica blanquiverde antes de que en el mercado de invierno saliera en busca de minutos que le permitieran recuperar su estado de forma. Viajó a Grecia y se enroló en el Veria, donde coincidió con el ex blanquiverde Raúl Bravo y donde apenas contó con minutos. Disputó siete encuentros, sólo tres como titular y dos completos, y marcó un gol. Sus guarismos, a pesar de tener una larga vinculación con el club califal, pueden significar su definitiva salida de El Arcángel este verano.
0