La primera novela del poeta Fernando Sánchez Mayo ve la luz 25 años después de haber sido escrita

La editorial Caligrama publica Cegueras y vanidades, la primera obra narrativa del reconocido y premiado poeta cordobés Fernando Sánchez Mayo, que escribió este texto hace 25 años.

Ahora, un cuarto de siglo después, la novela se ha hecho cuerpo, ofreciendo, según la editorial, una mirada de un pasado reciente, pero desconocido para muchos. “Yo creo que lo que la hace única es ese tono libertario, esa nueva sensación de respirar sin trabas y, sobre todo, lo que la puede hacer verdaderamente única es ese descaro descarnado en el que se va narrando la historia”, dice el autor.

Cegueras y vanidades es una novela que que se atreve a decir y que muestra que hay otras formas de entender la vida. “Hay también una crítica dura a cómo funciona el mundo subterráneo que rodea a la literatura, y hace un retrato de los personajes que pululan para beneficiarse del ego de los escritores”, explica Sánchez Mayo, que este mismo año ha publicado su última obra poética, Una radiante eternidad (Cántico), finalista en el XXXVII Premio Mundial Fernando Rielo de Poesía Mística.

En la novela, el autor cuenta la historia a través de Ernesto Herry, quien nos habla a su vez de Rodén, Rufina y Fran. Cada uno es un ser especial, único, con sus pasiones, sus traumas y sus enigmas. El sentido de la vida, la búsqueda de lo inmediato, los placeres y el deseo de la inmortalidad son algunos de los temas que Sánchez Mayo teje con minuciosidad en la trama, urdida con un texto “ágil, natural y sencillo”. 

Los hechos conmueven de una forma directa y en sus páginas se observa el buen hacer de un escritor que crea para entender. “Yo creo que escribía con la finalidad de explicarme el mundo. Era como si quisiera aprender de todo aquello que vivía y sentía”, afirma.

Fernando Sánchez Mayo nació en Córdoba en 1956. Tiene una larga trayectoria como poeta, con una decena de libros publicados. Ganó el premio nacional Juan Bernier con el poemario Un acto mínimo. Recibió el Escudo de Oro por la Unión Nacional de Escritores de España como reconocimiento a su obra poética. Ha escrito también obras de teatro que aún no han visto la luz.