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Alejandra Luque

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El Museo de Bellas Artes y el Archivo Histórico Provincial se han sumado al 150 aniversario de su nacimiento del pintor cordobés Julio Romero de Torres con una muestra compartida titulada Otras musas con la que muestras y analizan la influencia de la figura del artista y su obra en otras manifestaciones artísticas, como son la literatura, la música, el teatro, la danza y el cine a través de la pintura, fotografía, documentos y libros.

Esta doble exposición ha sido inaugurada este martes de la mano del delegado del Gobierno, Adolfo Molina, la directora del Archivo Histórico Provincial, Alicia Córdoba; su homólogo en el Museo de Bellas Artes, José María Domenech; y el comisario de la exposición, José María Palencia.

En el Museo de Bellas Artes, ubicado la Plaza del Potro, se han expuesto obras y fotografías que dejan clara la relación de Romero de Torres con la literatura y la música, en concreto, con el cante flamenco y la copla. Además, este museo cuenta con otro espacio, titulado El Universo femenino de Julio Romero de Torres, en el que se han destacado aquellas mujeres que tuvieron una relación de amistad con el artista y quienes, a su vez, jugaron un papel importante en la sociedad de su tiempo.

En la sección dedicada a la relación con el mundo de las letras hay retratos de literatos como Cristóbal de Castro, libros en los que la pintura de Romero de Torres se han usado como portadas o cariñosas dedicatorias de escritores como Valle Inclán o los hermanos Machado.

Paseando por otra sala del Bellas Artes, el visitante encuentra una sección dedicada a la música y al cante flamenco, donde llama la atención un espacio dedicado a Dora la Cordobesita y las hermanas Millanes. Es en esta zona donde se pueden escuchar los discos que Julio Romero tenía en su casa. Como no podía ser de otra manera, hay otro espacio dedicado a la configuración del mito de La chiquita piconera, un cuadro pintado durante la segunda mitad de 1919 y principios de 1930 en la que aparece la joven bonaerense de ascendencia española María Teresa López.

En este mismo espacio se pueden admirar fotografías que fueron dedicadas no solamente a Romero de Torres, ha explicado Palencia, “sino también, y fundamentalmente, a Enrique, quien iba con él marchaba siempre a Madrid con él a gestionar cuestiones para esta casa, y también a su hijo Rafael”, ha afirmado quien es también asesor técnico de conservación e investigación del Bellas Artes.

Amante del flamenco, Romero de Torres se relacionó con figuras del género y recibió dedicatorias musicales. Su fama inspiró a composiciones en su honor, como La Musa Gitana, y tras su muerte, su figura se popularizó más gracias a la zarzuela y a las coplas de artistas como Pepe Pinto y Concha Piquer.

En relación a la muestra que acoge el Archivo Histórico Provincial, el delegado del Gobierno ha explicado que la misma se centra en la relación de Julio Romero con otras artes como la danza, el teatro y el cine. Respecto a la primera, Molina ha apuntado que este autor “tiene un impulso libertador que inspira claramente a todo el mundo”. Además, “se sintió atraído por el teatro, después de relacionarse con Valle Inclán, y, por supuesto, por el cine”.

Por su parte, el comisario de la exposición del Bellas Artes ha asegurado que es difícil destacar una obra sobre otra, ya que “todas muestran la relación que tenía Romero de Torres con las mujeres escritoras y más progresistas y avanzadas de su tiempo, y también con autores, como Cristóbal de Castro; un personaje que todo el mundo tiene por sevillano, pero era cordobés”. Quien es también el asesor técnico de conservación e investigación de este museo ha apuntado, por otro lado,

La muestra estará disponible en el Museo de Bellas Artes y el Archivo Histórico Provincial hasta el 15 de enero.

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