La Guardia Civil investiga el origen del incendio de Cerro Muriano
El Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil de Córdoba investiga las causas del incendio junto al campo de tiro de Cerro Muriano que quemó 1.800 hectáreas de bosque en Sierra Morena a principios de julio.
Según ha podido saber este periódico por fuentes cercanas a la investigación, el Seprona ha abierto una investigación, tras recibir el informe previo realizado por el Infoca. Según las fuentes consultadas, el protocolo dicta que inicialmente sean los investigadores forestales del Infoca los que investiguen las causas del incendio y realicen un informe.
Ese informe, si entienden que hay indicios de delito, se eleva a las fuerzas y cuerpos de Seguridad del Estado, que en este caso es el Seprona, de la Guardia Civil de Córdoba, que ha abierto una investigación sobre la tesis de que pudiera existir un ilícito penal o no, aunque con todas las hipótesis abiertas. Por el momento, no se han producido detenciones.
El incendio se originó en la zona militar, según han señalado desde la Consejería de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía, citando una información difundida por la Agencia EFE y que provendría de fuentes del Ejército de Tierra.
El número final de hectáreas quemadas no se ha ofrecido de forma oficial, si bien supera las 1.800, de las que la gran mayoría, 1.300, corresponden a terreno del Ministerio de Defensa, y están en lo que en lo que los militares llaman “zona de caída”. Es decir, a donde van a parar los proyectiles del campo de tiro y maniobras.
En este ámbito, Ecologistas en Acción ha solicitado la destitución del general Fernando Ruiz Gómez como responsable último del incendio de Cerro Muriano, y la restauración de la zona afectada con cargo al presupuesto del Ministerio de Defensa, mientras que Enrique Santiago, diputado de Sumar por Córdoba, ha elevado varias preguntas al Congreso de los Diputados sobre esta cuestión.
El incendio más destructivo en Córdoba desde 2007
La suma de los terrenos militares y forestales ha convertido al incendio de Cerro Muriano en uno de los más destructivos registrados este año en España, junto al de la localidad almeriense de Níjar, donde inicialmente también se estimó que se habían quemado 1.800 hectáreas.
Oficialmente, el incendio que se originó el viernes 12 de julio en Córdoba ha sido un gran incendio forestal (para ello, el fuego debe sobrepasar las 500 hectáreas). Y pulveriza el registro del último gran incendio forestal que hubo en la provincia, originado en el puerto del Calatraveño, en Alcaracejos, y que afectó a unas 600 hectáreas.
Para irse a un fuego tan virulento hay que viajar al año 2007, cuando se registró un incendio en el campo de tiro de la base, y que, en aquel caso, quemó más de 4.100 hectáreas, más del doble de la estimación inicial para el que se ha estabilizado este lunes.
Un incendio que ha requerido el trabajo continuado de más de 200 efectivos, además de decenas de medios aéreos y terrestres. El mismo viernes, de hecho, se activó la fase de preemergencia situación operativa 0, lo que daba muestras de su envergadura.
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