El regreso de la minería a Córdoba
La Corduba romana, la Colonia Patricia de la época imperial, se construyó de mármol gracias al dinero procedente de las minas de Sierra Morena. Desde antes, incluso, la zona fue especialmente rica por los minerales extraídos de sus entrañas. Aún hoy es posible visitar antiguas minas romanas en las inmediaciones de Fuente Obejuna, donde quedan restos de los poblados de los trabajadores. Prácticamente desde la antigüedad hasta el año 2012 ha habido, de alguna u otra minera, mineros en el norte de la provincia de Córdoba. En 2012 se marchó el último, con el cierre de la explotación de carbón de La Ballesta, en Espiel, la última gran veta que alimentó a la térmica de Puente Nuevo. En un par de años pueden regresar los mineros al norte de la provincia de Córdoba.
La Junta de Andalucía avanza en hasta cuatro concesiones para minas en el norte de Córdoba (y una más en el sur, pero para la extracción de piedra caliza). La más avanzada es la mina de estaño que una multinacional va a explotar en Fuente Obejuna. La compañía Minas de Estaño de España planea explotar el yacimiento Oropesa en el municipio de Fuente Obejuna. Este es un depósito de clase mundial en su categoría. La iniciativa proyectada por la firma contempla una minería de transferencia de una corta alargada a cielo abierto que irá restaurándose de forma simultánea y con una elevada integración ambiental. Incluye, además, una planta de concentración de estaño con la que se incrementará el aprovechamiento de ese mineral. Para ejecutarla, la empresa ha estimado una inversión de 65 millones, que conllevará 714 empleos.
El proyecto se encuentra en la fase final de la tramitación de los documentos de la concesión, del proyecto de explotación, del plan de restauración y del estudio de impacto ambiental y se espera que el comienzo de las primeras actuaciones en la zona sea en 2024, según la información que este mismo jueves aportaba la Junta de Andalucía.
Pero hay más proyectos en marcha. En el norte coinciden otras tres concesiones que se van a adjudicar, probablemente, en los próximos meses. Dos buscan fluorita y una tercera barita. Las dos de fluorita son explotaciones de minería en interior y se localizan entre Villaviciosa de Córdoba y Obejo. La fluorita es un mineral del que salvo una veta en Asturias no hay reserva alguna en toda Europa. Su uso es clave en el flúor (con todos sus derivados) y en las aleaciones para fabricar acero o aluminio, abaratando costes.
En cuanto a la barita, también se localiza en Villaviciosa de Córdoba, en el corazón de Sierra Morena. Es otro mineral escaso a nivel mundial, con múltiples usos, que pasan desde los rayos equis hasta el vidrio o los recubrimientos.
Aparte, la Junta no para de conceder autorizaciones para investigar más posibles minas. Este jueves anunció que en toda la provincia tramita 32 solicitudes de autorización de investigación minera que sumarían alrededor de 179.430 hectáreas, en su mayoría para localizar y estudiar presencia de sustancias metálicas como, cobre, oro, plata, zinc, plomo, cobalto o níquel, además de algún permiso también para algunos minerales no metálicos como distena, cianita y otros aluminosilicatos o rocas ornamentales.
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