Una investigación europea analiza la cadena de valor del jamón ibérico de la DOP Los Pedroches

Una investigación europea, coordinada por la Universidad de Córdoba (UCO), ha celebrado su primer taller presencial en el Centro de Investigación Agroalimentaria (Cicap) de Pozoblanco, con dos objetivos: presentar los resultados principales del análisis de vulnerabilidad de la dehesa, y validar las conclusiones preliminares de la investigación sobre la cadena de valor de jamón ibérico de la DOP Los Pedroches.

Según ha informado la UCO en una nota, la cadena de valor del jamón ibérico de la DOP Los Pedroches, que se analiza dentro del proyecto de investigación europeo Moving, coordinado por la UCO, ha celebrado dicho taller con 15 actores locales para poner en común los primeros resultados extraídos, tras 18 meses de proyecto.

Moving es un proyecto que estudia 23 cadenas de valor en zonas de montaña, pertenecientes a 16 países europeos. Tres de estas cadenas están situadas en España, y dos de ellas, concretamente, en Andalucía: la cadena de valor del aceite de oliva ecológico de la Sierra Subbética y la del jamón ibérico DOP Los Pedroches de la Sierra Morena Cordobesa.

La metodología de Moving se basa en crear plataformas multi-actor para analizar de forma participativa los retos y oportunidades a los que se enfrentan las zonas de montaña europeas. En este taller, diversos actores, que forman parte activa de esta cadena de valor, han podido debatir y validar los resultados y conclusionesde la investigación.

El equipo de la UCO ha presentado el proyecto y los principales resultados extraídos del análisis participativo de vulnerabilidad de la dehesa que se llevó a cabo hace unos meses. Esta tarea del proyecto tenía como objetivo principal identificar de manera participativa los factores que pueden afectar a la producción de bellota y pastos en la dehesa, como recursos básicos para el funcionamiento de la cadena de valor de jamón ibérico DOP Los Pedroches, en un escenario de 20 años; así como mecanismos para poder reducir los efectos negativos.

Entre otras conclusiones, se han señalado que los principales impulsores de cambio según la percepción de los actores locales son la sequía, la presencia de plagas y enfermedades, el aumento de la temperatura y eventos extremos, como granizadas u olas de calor. Por eso, son imprescindibles medidas que apoyen un buen manejo de las fincas, una buena gestión del agua y que fomenten el rejuvenecimiento y la reposición del arbolado.

Igualmente, se ha remarcado la necesidad de seguir dando a conocer las especificidades de la dehesa como agro-sistema forestal en las administraciones públicas, sobre todo en lo referente a las ayudas de la PAC, así como el hecho de poder influir y participar en la toma de decisiones, utilizando el conocimiento específico de cada contexto.