Un cuarteto para pilotar en aguas turbulentas
Ser capitán del Córdoba, de este Córdoba, no es un adorno superfluo. Aythami Artiles (Arguineguín, 1986) representa la novedad en el cuarteto de jugadores que el vestuario ha designado para llevar el brazalete en el campo y la representación del colectivo en cualquier otro asunto de relaciones externas o internas. Poca broma con esto. El central canario gana así un peso dentro de la caseta y refuerza su imagen ante el cordobesismo, que le adoptó como una pieza referencial en la hazaña de la salvación de la temporada pasada. Aythami, descartado en la Unión Deportiva Las Palmas, fue uno de los refuerzos estelares en el mercado invernal. Llegó de la mano de Luis Oliver y se convirtió en el jefe de una línea defensiva que, hasta su incorporación, pasaba por ser la más goleada de toda la Segunda División. El jugador, que durante el verano ha estado salpicado por la polémica a propósito de una presunta salida de la entidad -previa solicitud de la carta de libertad-, aborda el inicio del curso como uno de los referentes de la plantilla.
Alfaro, Lara y Fernández son los tres primeros capitanes, según ha expuesto el club a través de un comunicado. Alejandro Alfaro (La Palma del Condado, 1986) llegó al club en la temporada 16-17 y ha defendido la blanquiverde en 62 encuentros oficiales. Su experiencia profesional y su capacidad de conciliación son especialmente apreciadas en el vestuario cordobesista, que durante los últimos tiempos ha tenido que lidiar con situaciones al límite tanto en lo deportivo como en lo que atañe a las relaciones con la propiedad. A Javi Lara (Montoro, 1985) y José Manuel Fernández (Córdoba, 1989) les toca la fibra el cargo: ambos son canteranos de la entidad y tuvieron que emigrar en su momento para buscarse el porvenir.
Lara salió del filial pero nunca tuvo una oportunidad en el primer equipo. Durante más de una década estuvo dando tumbos, a ritmo de un club por temporada, pasando por Villanueva, Unión de Irún, Écija, Almería, Alcalá, Elche, Alcoyano, Lucena, Mestalla, Ponferradina... hasta alcanzar sus mejores días en el Éibar -anotó el primer gol de la historia del club armero en Primera División- y en la Superliga India, donde se coronó como campeón y fue elegido el mejor centrocampista de la competición defendiendo al Atlético Kolkata. De allí llegó a Tenerife y, después de otra escala en la exótica competición india, regresó por fin al club que le vio nacer. “He cumplido un sueño”, dijo entonces. Ya lleva 45 partidos oficiales con el Córdoba CF, más encuentros que en ningún otro club.
Fernández, canterano del club, apareció en el primer equipo auspiciado por Lucas Alcaraz en la 10-11 y se destapó a las órdenes de Paco Jémez en el memorable curso 11-12, que terminó con el Córdoba en el play off de ascenso a Primera. En el mercado invernal del año siguiente salio traspasado al Real Zaragoza, de la máxima categoría. Tras salir del club aragonés, firmó en el Real Oviedo, que fue su paso previo al retorno a El Arcángel, donde tiene contrato en vigor hasta 2021.
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