CF Intercity - Córdoba CF — Crónica

Tres puntos con sabor a 'play off'

Pese a la derrota cosechada por el Córdoba CF la pasada jornada en El Arcángel, el objetivo del club blanquiverde seguía siendo el mismo: estar la temporada que viene en Segunda División. Pero, como se suele decir, del dicho al hecho hay un trecho, y el combinado califal debía de mostrar una reacción de campeón para seguir luchando por el ascenso directo o, al menos, conservar su segunda plaza de cara al play off. Las circunstancias no eran fáciles, puesto que la reacción debía de llegar en el Antonio Solana, hogar del CF Intercity. Un estadio cuyo terreno de juego había recibido numerosas críticas a lo largo de la temporada por su mal estado, lo que, sin duda, condicionaría el duelo para los blanquiverdes, dado su estilo marcado de posesión y presión.

De hecho, nada más comenzó el partido, esto fue algo que se pudo apreciar rápidamente. El CF Intercity, mucho más habituado a estas condiciones en su terreno de juego, saltó al césped como un torbellino, y a punto estuvo de atropellar a las primeras de cambio al Córdoba CF. Tras un centro con peligro en la primera jugada del partido, y antes de que se cumpliese el minuto 2, llegó la primera gran ocasión para los locales. Soldevila se sacó un potente disparo raso que detuvo Carlos Marín, pero no logró blocar, y Emilio Nsue, pese a cazar el rechace, no acertó a rematar y el balón acabó en córner. Susto, y de los grandes, para los de Iván Ania nada más comenzar el duelo.

Habría que esperar hasta el minuto 7 para presenciar el primer acercamiento de un Córdoba que, poco a poco, fue ganando metros en el Antonio Solana. Esta primera ocasión, un remate a cabeza de Toril, que volvía a la titularidad, a centro de Carracedo, sirvió para reactivar a los blanquiverdes. Sin embargo, el ritmo del partido era lento, cortado, soporífero. No ocurría absolutamente nada sobre el césped del estadio alicantino, más allá de muchas disputas en el centro del campo, interrupciones del juego y jugadas poco elaboradas. Solo un centro-chut de Guillem Jaime, que no logró acertar a rematar Xemi en el segundo palo, rompió la monotonía inicial.

Sin embargo, y cuando menos se esperaba, llegó el primer golpe del Córdoba. Corría el minuto 26 cuando Adilson percutió por banda diestra, asociándose con Toril que, al primer toque, dejó el esférico para un Albarrán que apareció por sorpresa desde segunda línea en el área para definir con su pie diestro, con un balón raso y cruzado, haciendo así el 0-1. Los blanquiverdes, sin comerlo ni beberlo, se veían por delante en el marcador y aprovechando así los pinchazos de varios de los equipos de la zona alta de la tabla. Tras ello, y pese a quedar cerca de veinte minutos de juego de la primera mitad, lo cierto es que nada ocurrió. Solo una buena parada de Gaizka Campos, y un tiro alto de Diarra, despertaron de la monotonía a alguno de los somnolientos espectadores.

Tras el paso por vestuarios, el guion siguió siendo similar a lo visto en la primera mitad, con un ritmo muy lento de juego, transiciones espesas y, por lo general, poco brillo. Eso sí, los de Iván Ania salieron un poco más enchufados, aunque la efervescencia duró apenas cinco minutos. Sin embargo, Calderón también avisó, aunque en esta ocasión ante su propia portería, en un intento de despeje que se envenenó y casi acabó en gol en propia puerta. Sin embargo, el susto se quedó ahí, aunque incitó a que el CF Intercity plantease una presión más alta que añadiese un poco de aliciente al duelo.

Lo cierto es que las llegadas de los alicantinos comenzaron a ser asiduas conforme se acercaba la hora de juego. Los centros laterales del conjunto local se repetían constantemente, y, en una de ellas, Soldevila estuvo apunto de lograr enganchar su remate, pero acabó en línea de fondo. Así, poco a poco se iban consumiendo los minutos de juego, con mucha lucha y brega, pero sin grandes pretensiones en el juego. El Córdoba no acababa de sufrir, pero tampoco lograba sentenciar el duelo, por lo que todo quedaba supeditado a acciones aisladas que decantasen la balanza. De hecho, en una de esas llegadas aisladas, ya en el 68 de juego, Lapeña pudo cometer penalti sobre Nsue, pero el colegiado, muy cerca de la jugada, no decretó la pena máxima.

Con ambas escuadras y su dinamita mojada, el encuentro en el Antonio Solana se acercó a los últimos minutos de juego con un marcador ajustado que podría complicarle las cosas a los de Iván Ania. Pero, una vez más, apareció uno de los grandes protagonistas de estas últimas semanas: Kuki Zalazar. El '9' blanquiverde, esta vez en una posición más asidua para él, lanzó un buen desmarque ante la llegada a la frontal de Álex Sala. El centrocampista no lo perdió de vista y, con un pase filtrado, asistió a Zalazar para que este, con su pierna izquierda, definiese fuerte al palo corto haciendo así el 0-2, para tranquilidad de los blanquiverdes. Así, en unos últimos minutos más plácidos -con el único susto de un remate franco de Nsué, que se marchó directamente fuera-, Ania dio entrada a los menos habituales como Leiva e Iván Rodríguez, certificando así finalmente unos peleados y difíciles 3 puntos.

Duelo difícil, sin duda, para el Córdoba CF en el Antonio Solana. Tal y como se esperaba antes del comienzo del duelo, el estado del terreno de juego condicionó en gran parte un partido marcado por la lucha y la brega de ambos conjuntos. Las ocasiones, que se podrían contar con los dedos de una mano, reflejaron esta circunstancia. Eso sí, los chispazos de calidad y el trabajo de los blanquiverdes acabó dando sus frutos para imponerse por un 0-2 que es muy favorable a sus intereses. A pesar de la victoria del Castellón en Linares -que mantiene el ascenso directo a 8 puntos-, el Córdoba CF ya es virtualmente equipo de play off, y logra un colchón de 4 puntos con respecto a la UD Ibiza, tercer clasificado; así como 5 con respecto al Málaga CF. Las clasificación matemática, eso sí, tendrá aún que esperar, puesto que una combinación rocambolesca basada en triples y cuádruples empates lo impide.