La rehabilitación de la Puerta del Puente usará las bacterias de la piedra para mitigar la humedad
La rehabilitación de la Puerta del Puente, adjudicada a la empresa Antroju, y que comenzará en julio, va a ser a través de un sistema pionero que usará las colonias de bacterias existentes en la piedra del monumento para producir carbonato y consolidar el soporte frente a la humedad, que era la culpable de los continuos desprendimientos de morteros.
La actuación ha sido presentada este lunes por el alcalde de Córdoba, José María Bellido, y por el presidente de la Gerencia de Urbanismo, Salvador Fuentes, y los técnicos de Urbanismo Juan Murillo y Rosa Lara. La metodología escogida para la renovación del emblemático monumento ha sido desarrollada por la Universidad de Granada y se ha aplicado con éxito, entre otros monumentos, en la Alhambra de Granada.
Se llama carbonatogénesis bacteriana, y lo que hace es potenciar la biota bacteriana presente en la piedra mediante la aplicación de un producto ecológico (Myxostone Mp3) que aporta nutrientes a la colonia y eso permite producir carbonato cálcico y, consecuentemente, la consolidación natural del soporte pétreo. En la aplicación de este método y su éxito son necesarios tres meses, y se aplicará a las zonas más deterioradas.
En las que están menos machacadas por la humedad, se ha optado por aplicar nanopartículas de cal, al tiempo que se han desestimado los químicos ante la experiencia negativa de su uso en diversos monumentos cordobeses, entre ellos la Puerta del Puente.
Cabe recordar que la última remodelación de este espacio fue en 2007, en un proyecto dirigido por Juan Cuenca que llegó a ser premiado por la Unión Europea con el galardón Europa Nostra 2014, pero que no logró salvar a la cara sur del monumento de los achaques provocados por la humedad, y que había provocado la caída de numerosos morteros.
Para evitar este deterioro, la GMU ha estado estudiando con sensores cómo afecta la humedad a la Puerta del Puente, de manera que la primera parte de la rehabilitación consistirá en impedir que ésta afecte a las piedras, algo que se hará invirtiendo la polaridad de las moléculas de agua para que, en vez de subir a la superficie, se queden en el subsuelo.
El objetivo del Ayuntamiento es que la obra esté terminada para inicios de 2021 y que así entonces recupere todo su esplendor esta construcción, que data del siglo XVI.
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