La crisis del 98 que pintaron los Romero de Torres
El Museo de Bellas artes acoge una exposición temporal con óleos y dibujos de Romero de Barros y sus hijos centrada en la temática social
La crisis de 1898 tuvo su plasmación en las artes plásticas con una mayor relevancia de la temática social en la pintura y, ejemplo de ello, fueron las obras que realizó Rafael Romero Barros y sus hijos: Rafael, Enrique y Julio Romero de Torres. Ahora, por primera vez de manera monográfica, el Museo de Bellas Artes de Córdoba acoge una exposición donde se muestran cuadros y dibujos de la familia creados con esa perspectiva social.
Así, una veintena de obras -entre óleos y dibujos- componen la exposición La familia Romero de Torres y el 98 que estará abierta al público hasta el 18 de septiembre y que supone, a la vez, un homenaje a la Escuela Provincial de Bellas Artes que nació en el edificio que ocupa hoy el museo y que ahora conmemora su 150 aniversario con distintas actos como esta muestra.
La muestra está integrada por tres óleos de Rafael Romero Barros, doce dibujos de Rafael Romero de Torres, tres de Julio y dos de Enrique, además de otros documentos nunca expuestos como es el álbum fotográfico dedicado a Rafael Romero Barros por sus alumnos de la Escuela Provincial de Bellas Artes en el curso 1891-1892 y la Corona poética dedicada a Ricardo de Montis.
Y es que la historia de a Escuela de Bellas Artes está ligada a la familia Romero de Torres, puesto que el centro docente tuvo su sede en el antiguo Hospital de la Caridad compartiendo salas con el museo. Además, la escuela tuvo un nutrido grupo de profesores de distintas disciplinas -pintura, escultura, música-, entre los que destacó Rafael Romero Barros y, entre el alumnado, también se encontraban sus hijos Rafael, Enrique y Julio.
De entre ellos destaca Rafael Romero de Torres, a quien se debe una importante trilogía de cuadros de temática social: Sin trabajo, Últimos sacramentos y Buscando patria., en los que se abordan asuntos como el desempleo y la emigración provocadas por la crisis del 98. En la misma línea, Enrique y Julio Romero de Torres mostraron cierto compromiso social en sus dibujos para ilustrar revistas como La Gran Vía.
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