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El Gobierno Andaluz reacciona contra el veto a los guías titulados en la Mezquita dos años después de una denuncia

Turistas en la Mezquita-Catedral.

Juan Velasco

15 de agosto de 2025 20:02 h

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La Junta de Andalucía ha decidido remitir a la Agencia de la Competencia y de la Regulación Económica el expediente relativo a las pruebas promovidas por el Cabildo Catedral de Córdoba para que los guías turísticos pudieran ejercer en la Mezquita-Catedral. La medida se adopta casi dos años después de que varios profesionales impugnaran dicho proceso, y tras la recomendación expresa del Defensor del Pueblo Andaluz, que reprochó a la Administración su falta de actuación.

La intervención de la institución que dirige el Defensor del Pueblo Andaluz se inició a raíz de que varios guías habilitados denunciaran que el Cabildo exigía superar una prueba de acreditación propia para poder trabajar en el monumento, una condición que consideraban ajena a la normativa y restrictiva del libre ejercicio de su profesión. El Defensor analizó el caso y, el 6 de mayo de 2025, emitió una resolución recomendando a la Delegación Territorial de Turismo, Cultura y Deporte en Córdoba que adoptara “las actuaciones necesarias para garantizar el ejercicio profesional de los guías de turismo acreditados y habilitados sin condiciones ni requisitos ajenos a la normativa” en el recinto de la Mezquita-Catedral.

En su respuesta, fechada el 26 de mayo, la Delegación Territorial detalló que, tras la llamada de atención, ha mantenido reuniones con el Cabildo y con los guías para intentar conciliar posturas, y que, siguiendo el criterio de su asesoría jurídica, ha remitido el expediente administrativo a Competencia. El objetivo es que este organismo analice si las pruebas impuestas por el Cabildo podrían constituir “infracciones en materia de libre prestación de servicios, unidad de mercado o defensa de la competencia”, según lo dispuesto en la Ley de Turismo de Andalucía y el Decreto que regula la actividad de los guías.

Además, la Delegación ha trasladado el caso a la Dirección General de Ordenación Turística para que estudie medidas alternativas que garanticen el acceso de los guías a los bienes integrantes del Catálogo General del Patrimonio Histórico Andaluz, como prevé la normativa vigente.

Turistas en la Mezquita-Catedral.

Agradece que la Junta haga mediación, pero recuerda que el Cabildo tiene que cumplir

El Defensor del Pueblo Andaluz ha valorado positivamente que la Junta haya fomentado el diálogo entre las partes y la remisión del expediente a Competencia, pero ha insistido en que la solución pasa por eliminar “trabas y condiciones improcedentes” impuestas por el Cabildo, que limitan el ejercicio profesional de guías ya acreditados por la autoridad turística.

“Valoramos este ejercicio de conciliación o de diálogo, sin olvidar que el cumplimiento de la normativa por quien la desobedece se nos antoja la mejor vía de corrección del caso”, recuerda el organismo.

En su análisis, la institución ha recordado que el caso afecta a principios básicos como la libertad de prestación de servicios y la unidad de mercado recogidos en la normativa europea, y ha subrayado que, aunque la Delegación Territorial archivara las actuaciones al no apreciar infracción sancionable, la situación constituye un incumplimiento claro del marco regulador.

En este sentido, el Defensor ha reclamado a la Administración que ejerza su “autoridad de control” para garantizar el respeto a la ley, incluso mediante resoluciones formales que dejen constancia del incumplimiento y que sirvan de base para aplicar medidas correctivas. “La cuestión que se expone en estos escritos dirigidos a la autoridad cultural y turística es la práctica de unas medidas de control establecidas por la entidad titular del monumento que deciden quién puede y quién no puede desplegar su ejercicio profesional en el recinto, cuestionando la acreditación que regladamente ostentan”, señala la resolución.

La Delegación de Cultura se ha tomado dos años para tomar cartas en el asunto, destapado en su día por Cordópolis. Inicialmente, de hecho, sugirió que acudieran a los tribunales a las personas afectadas, guías titulados a los que no dejan enseñar la Mezquita Catedral pese a que la normativa andaluza impide que el Cabildo los vete para ello.

El Defensor del Pueblo le dio un buen tirón de orejas a la Junta por esa dejación de funciones. Ahora, a la espera de saber qué dice la Agencia de la Competencia, el Defensor ha cerrado el expediente, si bien ha aclarado que seguirá el caso hasta que los guías turísticos titulados de Andalucía vuelvan a poder ejercer su trabajo en la Mezquita de Córdoba, que aún hoy es el único monumento declarado Bien de Interés Cultural (BIC) e inscrito en el Catálogo General del Patrimonio Histórico Andaluz que veta a profesionales turísticos.

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