El Cabildo anuncia la presentación del esperado Plan Director de la Mezquita-Catedral

¡Habemus Plan Director! Con un retraso de más de una década respecto al requerimiento de la Unesco, el Cabildo Catedralicio ha convocado a los medios el próximo 1 de diciembre para presentarles el Plan Director de la Mezquita-Catedral, un instrumento del que carece el monumento, lo que ha ocasionado denuncias por parte de colectivos ciudadanos e incluso del presidente del Consejo Internacional de Monumentos y Sitios (Icomos, por sus siglas en inglés), Jordi Tresserras.

Se trata de un instrumento en cuya elaboración deben trabajar conjuntamente el Cabildo, como gestor del monumento y la Consejería de Cultura y Patrimonio de la Junta, como responsable de su correcta conservación. Eso en la teoría. En la práctica pueden participar cuántas organizaciones se estime conveniente, incluida la sociedad civil o el Ayuntamiento de Córdoba. De hecho, Icomos recomendaba que, cuantos más actores, mejor.

Por el momento, lo único que se sabe es que el 1 de diciembre se pondrá sobre la mesa el nuevo plan director, tras el anuncio del Cabildo. Un anuncio que llega más de un año y medio después de que la consejera de Cultura de la Junta, Patricia del Pozo, dijera que estaría listo “en unos meses”. No se sabe de momento qué papel ha jugado el Gobierno Andaluz, que no es quien ha convocado a los medios.

Sí se sabe que, en enero de 2018, la Junta contestó al Defensor del Pueblo que estaban trabajando en el citado plan, lo que motivó que se cerrara el expediente abierto tras la denuncia de la Plataforma Mezquita Catedral. En aquel entonces, el Defensor del Pueblo consideraba “particularmente grave” la ausencia de un plan director para la gestión del monumento.

Un plan redactado por la Junta y guardado en un cajón

La Mezquita de Córdoba es el único gran monumento de Andalucía que carece de este instrumento, donde deben recogerse los usos y funciones. La Unesco fijó en 2008 unas directrices por las que los monumentos declarados Patrimonio Mundial, como era el caso de la Mezquita-Catedral, debían contar con “un plan de gestión para conservar el valor universal del bien”.

La Junta llegó a redactar un plan director para la Mezquita a principios del siglo XXI, pero nunca que llegó a entrar en vigor. El plan director fue redactado por los dos arquitectos conservadores del monumento, Gabriel Ruiz Cabrero y Gabriel Rebollo. La Junta lo devolvió por una serie de “deficiencias” pero el documento nunca regresó a la administración, por lo que jamás fue aprobado y lógicamente ya ha quedado “obsoleto”, explicó Patricia del Pozo en sede parlamentaria.

En teoría, es un plan maestro que determinaría qué decisiones se pueden tomar o no sobre la Mezquita. En Icomos, por ejemplo, esperan que sea garante para evitar en el futuro litigios como el que ha tenido lugar con la retirada de la celosía de Rafael de la Hoz, que el Tribunal Supremo ha estimado que se hizo de forma irregular.