Adjudican a Autismo Córdoba la atención en la capital de menores con TEA

La Junta de Andalucía ha adjudicado a la Asociación Autismo Córdoba el lote específico de Trastorno del Espectro Autista (TEA) para la capital cordobesa, incorporado en la licitación del Concierto Social para atención temprana en la provincia de Córdoba.

Según ha indicado el Gobierno andaluz en una nota, durante una visita al Centro de Atención Infantil Temprana (CAIT) de Autismo Córdoba, la secretaria general de Familias, Ana Mata, acompañada por la delegada de Salud y Familias, María Jesús Botella, y la presidenta de Autismo Córdoba, Francisca Suárez, ha señalado que “con el nuevo contrato se establece una mejora importante en la atención a los menores TEA que podrán recibir 12 sesiones mensuales en lugar de las ocho actuales”.

El nuevo modelo de atención temprana impulsado por la Consejería de Salud y Familias “parte ahora un mejor dimensionamiento de las necesidades reales de los destinatarios, con lo que se pretende optimizar la gestión, agilizar los pagos a las entidades y reducir las listas de espera con un objetivo final prestar la atención que necesita tanto el menor como su familias”, ha señalado la secretaria general de Familias.

Mata ha explicado que “este nuevo contrato supondrá un total de 4.320 sesiones anuales y un precio de 28 euros por sesión frente a los 22 euros actuales y por tanto, será un total de 241.920 euros”.

Por otro lado, la secretaria general de Familias ha hecho hincapié en que el conjunto de lotes de Córdoba Capital “ha experimentado un incremento de casi el 26 por ciento; pasando de las 66.144 sesiones anuales a las 83.328 con el nuevo contrato, con las que se podrán atender 856 menores en vez de los 689 actuales, lo que implica casi un 25 por ciento de incremento que es nuestro principal objetivo”.

De esta manera, Mata ha señalado que “al incrementar el precio de la sesión, en total se destinarán a la Atención Temprana en la capital 2.333.184 euros al año, frente al 1.455.168 euros al año actual, lo que ha supuesto un incremento del 60,33 por ciento”.

La secretaria general y la delegada territorial han agradecido la “gran labor que han realizado todos los profesionales de los CAIT desde el inicio de la pandemia por Covid-19; adaptándose a estrategias y herramientas puestas en marcha por el Gobierno de la Junta de Andalucía que garantizaran la continuidad de la prestación del servicio y haciendo posible la comunicación de las familias con los Centros de Atención Infantil Temprana, mediante atención telefónica y videollamadas para favorecer el contacto visual”.

Esta situación “ha supuesto un esfuerzo y gran compromiso de estos profesionales que han ofrecido una atención personalizada, de carácter específico, manteniendo la calidad asistencial y ajustando su labor a los horarios de las familias que han facilitado el trabajo con su colaboración”, ha puntualizado Ana Mata.

Atención en 2020

Durante 2020 se han atendido en toda la provincia de Córdoba un total de 2.386 menores en los 23 CAIT, garantizando siempre las condiciones de seguridad de los menores y los trabajadores de los CAIT.

La atención temprana atiende al desarrollo de la población infantil andaluza de cero a seis años, su familia y su entorno y su objetivo es prevenir posibles trastornos de desarrollo y atender a los niños que los padecen o tienen riesgo de padecerlos.

Esta atención se dirige a niños y niñas que presentan trastornos del desarrollo cognitivo; del lenguaje; de la expresión somática; emocionales; de la regulación y el comportamiento y de la relación y la comunicación.

El pediatra de atención primaria es el encargado de realizar un seguimiento del desarrollo y de evaluar cualquier señal de alerta que observe durante las revisiones y en caso necesario, los pacientes serán derivados a una de las Unidades de Atención Temprana.

Las unidades de Atención Temprana son el primer nivel de ayuda especializada ante los indicios de este tipo trastornos. En ellas, un experto equipo de profesionales se encargará de valorar las necesidades de los menores sobre la base de un diagnóstico funcional que incluye el estudio de las familias y el entorno.