Consultor financiero en ahorro-inversión y financiación, ayudo a mejorar las finanzas de las personas y de las empresas. Licenciado en Ciencias Económicas y Empresariales (ETEA). Asociado a €FPA España (European Financial Planning Association ). Entusiasmado en compartir ideas básicas sobre Educación Financiera y finanzas personales para que nuestra vida financiera nos resulte más fácil. Amplia experiencia de más de 25 años en diferentes entidades bancarias en dirección, financiación y Banca privada.
¿Rentabilidad sin riesgo?
Es probable que, en algún momento, te hayan ofrecido conseguir “altísimas” rentabilidades en productos novedosos o no tan novedosos de inversión.
Cuidado, todo producto de ahorro inversión lleva aparejado el concepto de rentabilidad y de riesgo.
Cuando decimos “todo producto”, incluye a toda alternativa de inversión en la que dejamos nuestro dinero a cambio de esperar obtener un rendimiento, “ladrillo y oro” también entrarían.
Antes de decidir sobre la contratación de un producto, deberíamos ser conscientes de los riegos u oportunidades relacionados con dicha inversión.
Riesgo y rentabilidad, son dos conceptos que van siempre unidos a cualquier instrumento o producto de inversión.
Es fundamental, entender perfectamente qué producto estamos contratando y sobretodo, a dónde va a ser invertido nuestro dinero.
No contratemos en aquello que no entendemos.
Cuándo hablamos del término riesgo en una inversión, nos estamos refiriendo a la posibilidad o probabilidad de perder parte o todo el dinero invertido.
Siempre existe riesgo en toda inversión, o dicho de otra manera, no existe inversión sin riesgo.
En todo producto en el que no se nos garantice con total claridad nuestro capital, ya es indicador de que conlleva un riesgo.
Ejemplos varios podríamos citar de hoy en día, los más habituales serían los fondos de inversión, las acciones, los bonos de renta fija e incluso los Planes de Pensiones.
No todos tienen el mismo nivel de riesgo, cuando vamos a contratar a una entidad bancaria un producto de ahorro inversión, nos deben indicar en una escala de colores (del verde al rojo) y números que van del 1 al 6, el nivel de riesgo.
Estemos atentos al semáforo del riesgo, y no asumamos más riesgo del que deseamos.
Si estamos dispuestos a asumir riesgos en una inversión, debemos exigir un retorno o rentabilidad acorde al nivel de riesgo que vamos a asumir.
La rentabilidad será el porcentaje de beneficio que nos debe generar la inversión que estamos realizando a un plazo o tiempo determinado.
Para poder establecer si un producto financiero es rentable o no, debemos tener en consideración el nivel de riesgo que conlleva y su rentabilidad esperada.
Hoy, ya podemos encontrar Depósitos a Plazo Fijo que nos garantizan una rentabilidad del 3,50% TAE sin riesgo y a plazo de un año.
Para un fondo de inversión que no nos garantice el capital a plazo de un año con un riesgo 3/6 en la escala anterior, ¿qué rentabilidad le deberíamos de exigir?
No siempre hay que asumir riesgo para conseguir rentabilidad.
Sobre este blog
Consultor financiero en ahorro-inversión y financiación, ayudo a mejorar las finanzas de las personas y de las empresas. Licenciado en Ciencias Económicas y Empresariales (ETEA). Asociado a €FPA España (European Financial Planning Association ). Entusiasmado en compartir ideas básicas sobre Educación Financiera y finanzas personales para que nuestra vida financiera nos resulte más fácil. Amplia experiencia de más de 25 años en diferentes entidades bancarias en dirección, financiación y Banca privada.
0