Infografías: cuando una imagen vale más que mil palabras
Andaba yo echando el rato en Pinterest observando cómo cada día aparecen más y más infografías inundando gran parte de los tableros que sigo...
Parece que las infografías están de moda, que es algo novedoso y que si vas a presentar algún tipo de dato y no lo haces por medio de una infografía es que no estás a la última. Pero ese pensamiento no puede estar más alejado de la realidad.
Los que vengan del mundo periodístico, o quienes como yo consumían periódico cuando sólo existía en papel, conocerán las infografías como un recurso utilizado desde tiempos de Maricastaña. ¿Recuerdas el típico dibujito que representaba cómo había sido, por ejemplo, un accidente de avión y explicaba la zona del impacto y otros datos diversos? Pues eso amigos es una infografía. Una vez más, no se ha inventado nada nuevo...
Son representaciones visuales de una situación concreta, de cifras y datos, de cronologías o de cualquier otro hecho representable de una forma más o menos visual, y es precisamente ese carácter visual en el que se sustentan muchas de sus ventajas.
Las infografías facilitan la comprensión e interpretación de la información que pretendes comunicar. También permiten sintetizar la información y presentar los datos de una forma mucho más accesible, ahorrando tiempo al receptor a la hora de consumir y procesar la información. Además facilita la retención de la información que representamos de forma visual (eso de que una imagen vale más que mil palabras).
Si hablamos de internet, las ventajas son obvias: consumimos contenidos visuales con mucha mayor facilidad que contenidos textuales. Además, al hacer la información más accesible, estamos mucho más predispuestos a compartirla, por lo que ofrecen una mayor probabilidad de ganar visibilidad y viralidad. Y a muy poco que nos esforcemos son llamativas y muy bonitas.
Si tienes buena mano y gusto para el diseño, es cuestión de echar un rato delante de cualquier software de diseño gráfico para conseguir plasmar la información de la que dispones en una infografía, pero si no tienes tiempo o la habilidad necesaria, o ninguna de las dos, no te preocupes que hay gran cantidad de aplicaciones online (gratuitas y/o de pago) que te ayudarán a hacer una infografía sobre casi cualquier cosa...
What about me, Wizify, Visual.ly y getabout.me te permiten hacer infografías sobre tu persona a partir de la información recogida en tus perfiles en redes sociales.
Wordle y Tagxedo son herramientas para crear nubes de palabras, de forma más o menos personalizable.
Visualize crea una infografía de tu curriculum vitae.
Easely y Piktochart son herramientas con las que crear infografías “genéricas” de forma más o menos personalizada a partir de las plantillas que ponen a tu disposición y utilizando los distintos recursos y elementos visuales que te ofrecen.
Como veréis herramientas hay muchas, ahora sólo queda estructurar la información de forma coherente para que la representación visual de la misma tenga sentido y sea comprensible.
Ah! Y cuando hagáis una infografía, recordad ponerle vuestro nombre y/o firma. Que las infografías, como las noticias, ¡vuelan!
0