¡Hola, Córdoba!

- non dixit Luis Miguel -

Qué poco le habría costado a El Sol de México decir esas dos palabras al principio, en medio o al final de ese concierto con el que inició el viernes por la noche su gira 2024 por España en el Coso de los Califas. Cara de imbéciles se nos quedó cuándo, para colmo, tras la “última” canción hizo mutis por el foro y, ¡hasta luego, Lucas! que si te he visto, no me acuerdo. 

Escoges el pueblo de tu novia para empezar tu gira más esperada… ¿y ni saludas? Llegas a España, abres cada telediario y cada programa de salseo, te subes la primera vez al escenario en una ciudad como Córdoba… ¿y no dices ni hola? Te encuentras un público entregado, con muchos cientos de euros menos en el bolsillo y décadas de larga espera para verte … ¿y se van sin oír ni una sola palabra de tu boca? 

Visto lo visto, muy inmerecidos me parecen los 100.000 euros con los que el Ayuntamiento de Córdoba aprobó el lunes patrocinar el concierto sobre la base de la promoción importante que para la imagen de Córdoba suponía. Pues no lo entiendo. La imagen de Córdoba iba a ser la misma con o sin los 100.000 del ala así que, digo yo que un ¡Hola, Córdoba¡, seguido de alguna palabrita de gratitud o emoción ante una ciudad que lo esperaba rendida y un Ayuntamiento tan generoso, es lo mínimo que se esperaba. El astro sol estuvo un pelín nublado.

Cuando te dedicas al sector servicios es importante reconocer la labor de los que te pagan solo por lo que esperan de ti. Esto no es comprar un coche, que pagas por las prestaciones que tiene definidas en su manual. Esto es como ir a darte un masaje y salir con dolor de espalda. ¡Menudo fiasco! Muchos pusieron la ilusión -y cientos de euros-  en ver en directo al hombre que lleva décadas acompañándolos. El día que se enamoraron con su canción de fondo, el día que sufrieron el abandono y creyeron que aquella letra se había escrito por y para ellos, o simplemente esos días en que, melancólicos, quieren sentirse más melancólicos todavía. Comprobar que detrás del mito que canta todo eso no hay ningún guiño para ti, es casi como contratar un abogado y que se quede sin voz en el juicio.

Manuel Carrasco tiene en 74.345 personas el récord de la mayor asistencia de público a un concierto en España. La SGAE le concedió hasta una entrada de oro simbólica. Pues hace unos días cogió la guitarra y se fue a dar un concierto gratuito a las 15 personas empadronadas en Flechas, un pueblo de la Sierra de la Culebra, en la España más profunda y despoblada. A cuadros se quedaron al verlo aparecer. Escucharlo en directo y hasta tocarle las manos pudieron. Anoche cantó con la misma cercanía en un magno concierto en El Bernabéu ante más de 65.000 personas… Defraudar a los que sueñan con verte, ahorran euros y hacen colas para estar ahí debería ser delito.

Estoy segura que esta noche mitigaré mi decepción “luismigueliana” con un Camilo feliz y entregado, mientras cantamos juntos Vida de rico, o eso de “quisiera tener en el pecho un botón, pa' borrarle la memoria al corazón”… 

Adiós, Luis Miguel.