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Sobre este blog

Soy cordobesa, del barrio de Ciudad Jardín y ciudadana del mundo, los ochenta fueron mi momento; hiperactiva y poliédrica, nieta, hija, hermana, madre y compañera de destino y desde que recuerdo soy y me siento Abogada. 

Pipí Calzaslargas me enseñó que también nosotras podíamos ser libres, dueñas de nuestro destino, no estar sometidas y defender a los más débiles. Llevo muchos años demandando justicia y utilizando mi voz para elevar las palabras de otros. Palabras de reivindicación, de queja, de demanda o de contestación, palabras de súplica o allanamiento, y hasta palabras de amor o desamor. Ahora y aquí seré la única dueña de las palabras que les ofrezco en este azafate, la bandeja que tanto me recuerda a mi abuela y en la que espero servirles lo que mi retina femenina enfoque sobre el pasado, el presente y el futuro de una ciudad tan singular como esta. 

¿ Mi vida ? … Carpe diem amigos, que antes de lo deseable, anochecerá.

Córdoba aún resiste con libros

Magdalena Entrenas

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Sobre este blog

Soy cordobesa, del barrio de Ciudad Jardín y ciudadana del mundo, los ochenta fueron mi momento; hiperactiva y poliédrica, nieta, hija, hermana, madre y compañera de destino y desde que recuerdo soy y me siento Abogada. 

Pipí Calzaslargas me enseñó que también nosotras podíamos ser libres, dueñas de nuestro destino, no estar sometidas y defender a los más débiles. Llevo muchos años demandando justicia y utilizando mi voz para elevar las palabras de otros. Palabras de reivindicación, de queja, de demanda o de contestación, palabras de súplica o allanamiento, y hasta palabras de amor o desamor. Ahora y aquí seré la única dueña de las palabras que les ofrezco en este azafate, la bandeja que tanto me recuerda a mi abuela y en la que espero servirles lo que mi retina femenina enfoque sobre el pasado, el presente y el futuro de una ciudad tan singular como esta. 

¿ Mi vida ? … Carpe diem amigos, que antes de lo deseable, anochecerá.

En los tiempos que corren dedicarse a vender libros es una hazaña impagable. Sí, libros de papel, de esos que se tocan y se huelen y sobre los que le puedes preguntar tus dudas a los valientes que te atienden detrás del mostrador.

Córdoba es una ciudad que disfruta de poca salud si de comercio auténtico hablamos. Y me refiero a ese comercio que no es franquicia, que lleva años y hasta décadas abierto, que es especial, artesano o, cuanto menos, diferente y en el que te atienden personas a las que les importa lo que buscas. 

Ahora atravesamos un momento en el que esa salud es horrorosa incluso para las tiendas de gigantes que fueron, precisamente, las que les dieron la puntilla a muchas de las tiendas tradicionales. Y ahora, cuando aún no me recupero del shock del cierre de tiendas como Zara Home o Massimo Dutti, salta la última noticia. El cierre de Oysho, no solo sin reubicación, sino sin recolocación de todas las empleadas. A la calle sin más.