Antonio Repullo: “La herencia recibida no puede ser una excusa permanente”
El teléfono de Antonio Repullo (1975) no deja de sonar desde hace un par de semanas. También ha notado cómo, de repente, le saludan más por la calle. Hasta gente que antes no lo hacía. Es el nombre de moda en la política cordobesa. Cuando todas las quinielas apuntaban hacia otro lado, el presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, optó por él como su delegado en la provincia de Córdoba.
Antonio Repullo puede ser un desconocido para la opinión pública y gran parte de la ciudadanía, pero no para la política cordobesa. Ha sido militante de Nuevas Generaciones y del PP desde que era estudiante, se formó en la Facultad de Derecho de Córdoba, trabaja (aún sigue con el traspaso) en un bufete de abogados de la ciudad y ha sido jefe de gabinete en la Subdelegación del Gobierno con Juan José Primo Jurado y gerente del Consorcio Provincial de Desarrollo Económico de la Diputación cuando Salvador Fuentes era su vicepresidente.
El nuevo delegado del Gobierno ocupa un despacho amplio en la calle San Felipe donde hace casi dos décadas que no se sienta un hombre. Tres delegadas del Gobierno le preceden (Esther Ruiz, Rafi Crespín e Isabel Ambrosio) pero ahora dirige una delegación donde los hombres son minoría: dos frente a cinco mujeres.
Poco a poco va comprobando la inmensidad de la gestión de una administración como la Junta de Andalucía, que es, sin dudas, la que más competencias tiene en Córdoba. Y concediendo entrevistas, donde se mueve como pez en el agua. Es político pero también es abogado. Sabe lo que dice y lo que no.
PREGUNTA. ¿Cómo le ha cambiado la vida de un día para otro?
RESPUESTA. Pues mucho. Es un puesto que no esperaba. Siempre consideras que este tipo de cargos se piensan para gente con una trayectoria política más amplia, institucionalmente hablando: que hayan sido parlamentarios, diputados, concejales... Es verdad que yo no he tenido esa experiencia. La verdad es que con mucha ilusión. Me ha cambiado mucho la vida. Ya no puedes manejar tus horarios ni tu vida como quieres sino que te tienes que dejar llevar por los acontecimientos.
P. Olvídese de la vida normal a partir de ahora.
R. Sí, sí. Cambia bastante. Estaba acostumbrado a llevar a los niños, a traerlos, a hacer muchas cosas en casa. Y todo eso cambia totalmente.
P. El teléfono no para de sonar.
R. Los whatsapps, el correo... Y hay algo que más responsabilidad te da que es el 112. Hay que estar pendiente siempre del teléfono en las emergencias. Yo era de los que dejaba el teléfono y me olvidaba de él. Ahora estoy permanentemente mirándolo por si entra alguna cosa, para que estemos informados y salir al paso de alguna situación que pueda surgir.
"El traspaso de poderes ha sido excelente"
P. Ha pasado por la Subdelegación y también por la Diputación. Imagino que ahora como delegado del Gobierno ha comprobado las enormes competencias que tiene la Junta de Andalucía.
R. Efectivamente. Desde fuera se intuye, todos tenemos relación con la administración autonómica, pero hasta que no estás dentro y empiezas a ver las competencias... Por ejemplo, una de las que desconocía es que el delegado del Gobierno nombra al presidente de la Plaza de Toros (risas). No me lo podía imaginar. Aquí se llevan juego y espectáculos, y no caes, no caes. Es verdad que hay algunos matices que te quedas un poco sorprendido.
P. ¿Es taurino?
R. Me gustan los toros. Fui muy aficionado en su momento e incluso fui abonado con 18 y 19 años. Luego la verdad es que he ido de vez en cuando, pero tampoco soy un aficionado de acudir a la plaza o ver las corridas en la tele. Pero es verdad que me gustan los toros.
P. Bueno, ahora puede ser hasta presidente de la Plaza de Toros.
R. (Risas). Vamos a delegar esa competencia. Seguro.
P. Aparte, ¿qué es lo que más le ha sorprendido al entrar a este edificio de San Felipe?
R. Me ha sorprendido gratamente el trato con la gente, la recepción que he tenido en la Delegación y las ganas de trabajar e ilusión que he percibido de todo el staff funcionarial.
P. ¿Y cómo ha sido el traspaso de poderes?
R. Excelente. No tengo más que agradecer a Esther (Ruiz) el trato que he recibido desde que me comunicaron que iba a ocupar este cargo. Me puse en contacto con ella. Ayer (la entrevista se celebra el jueves) me mandó un mensaje para decirme: oye, lo que necesites a partir de ahora o si tienes alguna duda estoy a tu disposición, y quiero hacer extensivo esto al resto de delegados territoriales. Me consta que con los nuevos delegados territoriales se está haciendo esa comunicación para que la puesta en marcha de las delegaciones no sufra ninguna alteración, que yo creo que es lo importante. Que haya normalidad en el traspaso, que es cierto que hay un cambio de color en el Gobierno, pero la gente no tiene que sufrir ese cambio. Al revés, tiene que servir para que haya un nuevo impulso a esta administración.
"No hemos venido aquí a empatar, a que las cosas sigan igual"
P. Bueno, aquel año sin Gobierno en España en el que hubo que repetir elecciones generales la economía creció (risas).
R. Sí, sí. Un detalle. Esperemos que siga creciendo y que sea gracias a la labor del nuevo Gobierno de Juanma Moreno.
P. No sé si han encontrado ya algo en los cajones o alguna sorpresa.
R. Hay temas que tienes que retomar con urgencia, pero no hay sorpresas. Por ejemplo, los actos por el Día de Andalucía. Había algo de trabajo hecho, pero nos hemos encontrado con que tenemos que concretarlo rápidamente. Es verdad que el anterior equipo había avanzado pero había querido dejar para el siguiente determinadas cuestiones. Los delegados territoriales es que empiezan ya. Hasta ahora estaba yo solo. No tenía más capacidad que para abrir los cajones de mi despacho. Te aseguro que los de mi despacho no guardaban ningún cocodrilo. Con Esther ha sido todo fantástico. Nuestro ánimo es trabajar por la gente, que esta nueva etapa dé sus frutos y unos resultados positivos para todos, y bueno, aprovechar lo bueno que se ha hecho. Con casi 40 años de gestión del PSOE en la Junta en Andalucía se ha avanzado. Entiendo que se podía haber avanzado mucho más. Pero para eso llegamos ahora nosotros, para intentar complementar esa situación.
"En casi 40 años de gestión del PSOE en la Junta en Andalucía se ha avanzado. Entiendo que se podía haber avanzado mucho más. Pero para eso llegamos ahora nosotros"
P. Su perfil es bastante más moderado que el que se esperaba mucha gente con un cambio de gobierno así, sobre todo habiendo recibido los votos de quienes los han recibido (Vox). ¿Es usted así, le gusta más este tono de diálogo como el del otro día con la alcaldesa, donde parecían casi del mismo partido, o es que el poder cambia y modera?
R. A ver. Soy abogado y lo seguiré siendo próximamente. No sé cuánto tiempo. Yo esto me lo tomo como un paréntesis dentro de mi vida profesional. En mi profesión básicamente lo que he hecho siempre ha sido negociar. Puedes hablar con compañeros con los que he tratado y al final tu profesión te obliga. Yo no sé cómo era antes de ser abogado, no me acuerdo, pero es verdad que mi profesión me ha obligado a que el diálogo esté en el centro de cualquier mesa de debate. Yo soy así. Lo mismo cambio a partir de ahora. Espero que no. Ahora mismo estamos en una tesitura política en la que lo que hace falta es el diálogo. Ya no hay grandes mayorías. El PP está cogobernando con Ciudadanos. Si no empiezas a dialogar con tus socios de gobierno, mal empezamos. Entonces entiendo que tanto con Ciudadanos, que estamos obligados a entendernos y lo estamos haciendo muy bien, como con el resto de fuerzas políticas lo que toca es hablar y ponernos de acuerdo. Hay mucho en la política de parafernalia, pero para solucionar los problemas cuando te sientas con Ciudadanos o con Vox, al final la gente lo que quiere es solucionar los problemas. Ahí siempre nos vamos a poner de acuerdo. Y siempre los políticos se han puesto de acuerdo. El trasfondo de los parlamentos está lleno de acuerdos y de diálogo.
"Esto me lo tomo como un paréntesis dentro de mi vida profesional"
P. Aquí encima de la mesa tenemos los periódicos de hoy (el jueves) y las portadas son todas de la trifulca nacional después de que se tumbaran los presupuestos del Gobierno. El debate ha sido lo siguiente a bronco. Sorprende cuando de repente los partidos estáis en el Parlamento diciéndoos de todo y luego cuando se sienta con la alcaldesa el diálogo fluye.
R. Son ámbitos políticos diferentes. Si a mí me hubiese tocado estar en el Parlamento habría suscrito cada palabra que ha dicho Pablo Casado. Y me dirían: no eres tan dialogante. Bueno, pero es lo que toca en ese momento. La situación es tan opuesta entre lo que hacen unos y dicen otros, que hace que se tensione mucho la cuerda. No quiere decir que yo me siente con la alcaldesa, a la cual conocía de antes y con la que tenía una buena relación, y ahora nos tengamos que tirar los trastos a la cabeza porque ella tenga que defender la tesis de Pedro Sánchez y yo la de Pablo Casado. Son niveles políticos diferentes, competencias diferentes y a las que hay que aplicar las consideraciones que tocan. Ahora mismo no tengo ningún argumento para pelearme con la alcaldesa ni con el presidente de la Diputación fuera de lo que es el nivel de competencias de cada uno.
P. La alcaldesa les ha puesto bastantes tareas. Y el Pleno del Ayuntamiento del martes ha aprobado una moción con más tareas todavía.
R. Yo estoy encantado. Son los mismos proyectos que estaba pidiendo el grupo del PP. Mi gran amigo y portavoz José María Bellido los ha estado pidiendo en los últimos años. Y curiosamente es que votaban en contra. Es un poco extraño. Pero oye, entiendo que la alcaldesa va a pedir por su ciudad. Distorsiona que antes de ayer no lo estaba haciendo y ahora sí. Pero hay que una nueva etapa ahora en la que estamos todos de acuerdo y vamos a ver si eso sirve para que saquemos los proyectos adelante.
"Mi profesión me ha obligado a que el diálogo esté en el centro de cualquier mesa de debate. Yo soy así"
P. ¿Cuál es el proyecto más urgente que tiene encima de la mesa?
R. Hay bastantes. El catálogo que aprobaron en el Pleno puede servir de guía para los temas de Córdoba. Prefiero que sea el presidente Juanma Moreno, que va a venir el lunes y va a tener una reunión con la alcaldesa y el presidente de la Diputación, el que priorice esos temas. Nosotros le hemos dado una cartita y él con sus consejeros, con los delegados y tal, estableceremos los cauces adecuados para esos criterios y esas prioridades.
P. ¿Qué tiene que temer o esperar un familiar que está buscando a sus familiares fusilados por el franquismo en los cementerios de Córdoba?
R. Hay una legalidad vigente que es la que hay que aplicar. Cuando exista otra aplicaremos otra. Ahora estamos en una nueva etapa con un arco parlamentario diferente. Hay unas posiciones distintas. Si el Parlamento decide que hay que cambiar la ley la aplicaremos.
P. ¿Esos familiares pueden temer que no se complete el proceso de exhumación de los más de 4.000 fusilados que hay en la ciudad de Córdoba?
R. Esos familiares no tienen que temer absolutamente nada. Si en el Parlamento se aprueba otra normativa y se redirecciona esa política, tendremos que acatar lo que diga la norma.
"Los familiares [que exhuman a sus familiares fusilados] no tienen que temer absolutamente nada. Si en el Parlamento se aprueba otra normativa tendremos que acatarla"
P. ¿Ha encontrado entre los cajones de la Delegación del Gobierno el informe que solicitó a los servicios jurídicos Isabel Ambrosio sobre la titularidad pública de la Mezquita Catedral?
R. Aquí no he encontrado ningún informe todavía. No hemos escarbado aún en ningún sitio. Ya te digo, la delegada de Fomento, Cultura y Patrimonio se incorpora hoy y todos los informes que haya los estudiaremos y valoraremos como lo que son, informes.
P. En la Mezquita habrá un cambio de postura.
R. El posicionamiento que hemos mantenido desde la oposición ha sido muy claro. Y está bastante fundamentado. No es una cuestión ideológica o electoral. Tiene bases muy sólidas. Nosotros no vamos ahora a cambiar nuestra visión de la realidad.
P. La Iglesia y el Cabildo pueden estar tranquilos.
R. Bueno, yo digo igual que antes. Hay una legislación que se aplica y una interpretación de la ley que en este caso coincide con la del Cabildo.
P. La Junta de Andalucía tiene una enorme cantidad de competencias en patrimonio y cultura. El gobierno andaluz tiene, por ejemplo, Medina Azahara, que acaba de ser declarada Patrimonio Mundial por la Unesco. No sé qué planes tiene el nuevo gobierno andaluz con el yacimiento.
R. Es una de las prioridades que hemos marcado...
P. ... en esa cartita.
R. Sí, sí, ya te adelanto. En ese pequeño resumen de cuestiones en las que se ha avanzado. Se ha conseguido esa designación y bueno, lo que hay es que impulsarlo. Tenemos una joya del patrimonio mundial. No es una cuestión localista. Tenemos que aprovecharlo. Ese sello nos tiene que servir para impulsarlo y para complementar una visita a Córdoba, a sus calles, a la Catedral y a la Mezquita, para que la gente pernocte más, disfrute de la ciudad y de la provincia.
P. Estuvo personado en la causa de la Fundación Guadalquivir.
R. El despacho lo ha llevado.
P. Conoce bien el caso. No sé si ahora ha visto algo o se ha interesado por este asunto.
R. Como profesional del despacho no puedo entrar. Hablo como abogado y miembro de mi bufete. Estamos terminando el proceso para dejar el accionariado. No puedo comentar temas internos del despacho. Puedo comentar lo que he oído y visto en los periódicos. En este tema me gustaría no entrar porque puedo tocar asuntos que me tocarían profesionalmente y no debo.
P. Hay una famosa frase que se usa en este cambio de poderes. La “herencia recibida” sirve como salvoconducto para los primeros años de gobierno. Está ahí el caso de que el presidente ha aprobado eliminar el impuesto de Sucesiones pero no ha podido bajar el resto aludiendo a la “herencia recibida”. ¿Va a abusar de este término?
R. Me gustaría no usarlo. Tenemos que ser responsables. No desde el minuto uno. Antes tenemos que conocer cómo funciona esto, que es inmensamente grande. Tenemos multitud de competencias y a alguna hemos hecho referencia antes. Nos puede servir de excusa durante los primeros meses. Es lógico. Todos los compañeros periodistas lo admiten y me están tratando muy bien. Pero eso no puede ser una exclusa permanente. A la gente hay que hablarle claro: esto se puede o no. Si no se puede hacer un hospital, o en vez de construirlo se tiene que hacer algún otro tipo de centros, vamos a decirlo, vamos a hablarlo claro. Vamos a solucionar las cosas y no a perdernos en batalla de si esto es culpa de uno o de otro. Si no podemos hacerlo todo en un año habrá que esperar al siguiente. Todo en un año, evidentemente, no se puede hacer. La legislatura dura cuatro años. Al cabo de cuatro años es cuando hay que medir el cumplimiento de las promesas.
"Si no se puede hacer un hospital, o en vez de construirlo se tiene que hacer algún otro tipo de centros, vamos a decirlo, vamos a hablarlo claro"
P. Soy de los pocos que me he leído el programa electoral del PP, que era un tocho de 600 páginas y solo para la provincia de Córdoba había como 50.
R. Sí, sí, se ha hecho buen trabajo.
P. Han sido muchos años de demandas también.
R. Sí, también tenemos que ponernos de acuerdo con nuestros socios. Esto no es como hasta ahora, cuando el PSOE tenía mayoría absoluta o suficiente para gobernar. Todos los delegados eran suyos y podía hacer una estrategia más global de las cosas. Nosotros nos tenemos que sentar con los delegados, ver cuáles son sus prioridades y dar la sensación de que es un gobierno único. Es lo que se está trasladando desde San Telmo. Lo que percibe la gente es que hay un gobierno único y no hay una división. Ahora vamos a tener una reunión y vamos a explicar eso: vamos todos a una, vamos a explicar lo que tenemos que hacer y a trabajar.
P. De momento, con Ciudadanos tienen una relación estupenda.
R. Magnífica. Tengo mucha relación con Marcial Gómez Balsera, que ha sido mi procurador en el despacho, y con Isabel Albás también. Con los nuevos delegados, telefónica porque no los he conocido personalmente. Pero la relación por teléfono hasta estos días, fantástica.
P. ¿Ha habido problemas a la hora de la elección de delegados? Me refiero. Sé que ha habido tensión y gente que se ha postulado. Y otros que ha habido que fichar.
R. Es normal. Hablo de la parte que conozco. Cuando en un partido político se da una situación extraordinaria como esta sucede. Lógicamente, dentro de nuestros cuadros, con representación en todos los municipios de la provincia y en la capital, hay mucha gente que tiene sus expectativas. La ambición de cada uno es tan legítima como la de otro. Cada uno aspira a ser delegado de la materia que considera más útil. Ahí el presidente ha acertado y ha formado un equipo de mujeres muy interesante.
"Si aplicásemos las cuotas probablemente hubiera habido menos mujeres en este equipo"
P. ¿Cuál es la composición exacta?
R. Si me quitas a mí, cinco-uno. Somos siete, dos conmigo.
P. ¿Se ha buscado o ha surgido?
R. En el PP siempre hemos dicho lo mismo: nunca hemos sido grandes defensores de las cuotas. Creemos más en el mérito y en la capacidad de la gente. ¿Por qué si ahora tenemos tres mujeres extraordinarias para ocupar los puestos que se le han asignado no van a ser ellas? Si aplicásemos las cuotas probablemente hubiera habido menos mujeres en este equipo. Particularmente prefiero este sistema. Siempre he trabajado mejor con mujeres que con hombres. En el Consorcio del personal que teníamos allí había un 25% de hombres y el resto de hombres, y en la Subdelegación igual. Siempre he trabajado muy bien con mujeres.
P. Ya solo nos falta una presidenta del Gobierno, aunque me parece que no hay ninguna candidata.
R. A corto plazo, parece complicado.
P. Intentó serlo Soraya, pero pasó lo que pasó. El PP ha estado prácticamente 40 años intentando gobernar la Junta y ahora, con sus peores resultados, la aritmética electoral ha hecho que obtenga el poder. A mí me ha resultado curioso cómo este proceso tan deseado ha acabado tensionando tanto el partido, principalmente por los nombramientos.
R. Yo no tengo esa percepción. No creo que sea una cuestión de tensiones. Es el resultado de que tenemos gente muy válida para ocupar ese tipo de puestos. Esto es igual que el Real Madrid o los equipos amplios. Hay tensiones en los vestuarios si tienes un equipo muy amplio porque todo el mundo quiere jugar. Pero eso es una cosa y otra es que el partido se haya tensionado o que incluso haya habido alguna fractura. No responde a eso, sino a la ambición de la gente desde el punto de vista positivo. Sana. La gente se ve con ganas y con capacidad para asumir retos. Es lo más normal del mundo. Pasa en cualquier empresa, en cualquier familia, en todos los ámbitos de la sociedad.
P. Cuentan que se ha elegido a un delegado del Gobierno de consenso, muy bien visto por todos los militantes y las familias del PP de Córdoba.
R. Si tú lo dices, será verdad (risas).
P. Se pone fecha de caducidad. No sé si con un plazo concreto como el presidente de la Junta, que se da ocho años máximo en el cargo.
R. Mis aspiraciones a medio plazo son cumplir lo mejor que pueda esta etapa profesional y vital. Cuando pasen estos cuatro años mi pensamiento hoy por hoy es volver a mi profesión. Después de la Subdelegación dije que me iba a volcar en el despacho. Pero claro, surge una historia de este tipo y no vas a decir que no. Si después de estos cuatro años surge cualquier otra cuestión habrá que mirarlo. Hoy por hoy, soy abogado y lo seré toda mi vida. Mi pasión es la abogacía. Agradecer a mis maestros, Enrique y José Luis Garrido, que me abrieron los ojos de una vocación que ha sido mi vida y que tarde o temprano volverá a ser mi vida.
"Soy abogado y lo seré toda mi vida"
P. Lo suyo también es una anomalía. Normalmente los políticos de hoy día no tienen un sitio a donde volver. Y eso los hace menos libres.
R. Puede ser, puede ser. Soy un gran defensor del político integrado en un partido, de los que llaman entre comillas profesionales de la política, pero con una connotación negativa. Creo que ese tipo de políticos, digo más, ese tipo de servidores públicos, tanto si gobiernan o están en la oposición, son imprescindibles en nuestra democracia. Y tacharlos y segmentarlos... el que hace eso no conoce la labor de ese perfil de profesionales. Pero también considero importante que haya un reparto. Para mantener un partido político, que son pilares para nuestra democracia, es importante que haya gente que trabaje en los grupos, que sean concejales, que algunos estén liberados, pero también es muy importante, y lo estamos viendo en los últimos nombramientos de la Junta de Andalucía, captar a gente que entre y salga. Que le dé cierta frescura a la política. En ese sentido, mi planteamiento es ese: que haya un porcentaje de gente que mantenga la llama y la actividad política. Yo estoy en mi despacho y soy incapaz de mandarte notas de prensa, nutrirte de información o sacar propuestas. Igual un arquitecto, un médico, un maestro... Es complicado: el ámbito político necesita de esa gente. Pero también debe haber un porcentaje que se debe incrementar poco a poco de gente que vea la política desde un punto de vista ocasional. Es decir, una vocación, porque esto te tiene que gustar. Y algo transitorio.
"Hay gente que se lleva toda su vida en política y es absolutamente libre; y gente que no vive de la política y que son esclavos de muchas cosas"
P. En el sentido griego de la palabra. Eres un ciudadano, de repente te eligen para representar al resto de tus ciudadanos y al final regresas y te vuelves a convertir en un ciudadano más.
R. Yo creo que eso debe hacerlo natural.
P. Pero hay cierta tendencia a profesionalizar la política desde la juventud. Por ejemplo, la Facultad de Derecho de Córdoba es cuna de militantes del PP y de Nuevas Generaciones. En el caso del PSOE e IU ocurre igual. Muchos no han tenido otro puesto de trabajo fuera de la política. Yo pienso que eso hace al político menos libre, pues hipoteca su futuro a tener un cargo o un puesto de trabajo relacionado con la política.
R. También es cierto que la experiencia de haber trabajado en la política te da capacidad para en un momento dado tener una salida fuera. Hay muchos ejemplos de todos los partidos de personas que han estado en política mucho tiempo y luego no han tenido problema en insertarse en una vida laboral estable. La libertad cada uno la gestiona como considera oportuno. Creo que ese es un tema muy particular. Hay gente que lleva toda su vida en política y es absolutamente libre; y gente que no vive de la política y que son esclavos de muchas cosas.
P. ¿Cómo se le ocurre entrar a primera línea de la política con la que está cayendo ahora mismo?
R. Bueno, a mí no se me ocurre (risas). Se le ocurre a otros.
P. Pero ha dicho que sí.
R. He dicho que sí. Lo comentaba antes. También es un reto. No soy una persona que no haya tenido relación con esto. No quiero proyectar una imagen confusa. Fui secretario general de Nuevas Generaciones con 20 años, he estado siempre vinculado al partido, he formado parte de comités ejecutivos, en el último congreso con Adolfo Molina de presidente he sido nombrado vicesecretario general de Organización y me he pateado toda la provincia buscando candidatos, que es lo que más me gustaba hasta este momento: tener el contacto con los afiliados. Cuando me plantean esto es verdad que es el abismo, es brutal. Pero es cierto que tengo un apoyo, sé quién es quién, y no el perfil de un abogado al que cogen de su despacho y lo ponen en un sitio de esta responsabilidad. No quiero decir con eso que me falta experiencia y muchas cosas que pretendo aprender lo más pronto posible. En cualquier caso, se le ocurre a otro. En este contexto que he comentado, lógicamente no puedes decir que no.
P. Ahora se va a perder las elecciones municipales, después de tanto buscar candidatos en la provincia. Aunque imagino que el trabajo lo tendrá prácticamente acabado.
R. Ya tenía el trabajo hecho. Me faltaban un par de cosillas y gracias a Dios una se remató ayer. En ese sentido, bien. Y el poco tiempo que me quede, si tengo que echar una mano aquí estoy. Llevo ensobrando papeletas mucho tiempo y no me duelen prendas en seguir haciéndolo.
P. Elecciones vamos a tener para hartarnos en los próximos meses.
R. Ayer estuvimos haciendo la cuenta porque no van a caber las urnas en las mesas: entre municipales, europeas, Congreso, Senado... Si eso es lo que hay, para adelante.
"Me gustaría que cuando miremos hacia atrás esto haya merecido la pena"
P. ¿Cómo le gustaría ver dentro de cuatro años la provincia y el funcionamiento de la Junta?
R. Se lo he comentado a todos los delegados territoriales: me gustaría que cuando miremos hacia atrás esto haya merecido la pena. No hemos venido aquí a empatar, a que las cosas sigan igual. Que nos sintamos orgullosos de lo que hemos hecho. Y si lo hacemos será porque hemos dejado una provincia mejor que la que nos encontramos. Que la gente esté mejor, que no tenga que irse fuera para trabajar, que pueda elegir quedarse en Córdoba, o en su pueblo, pero que tenga oportunidades, que haya menos paro, que los servicios sociales den una respuesta adecuada a los ciudadanos y que la gente tenga un buen recuerdo nuestro.
P. En los próximos años el reto de la despoblación en la provincia creo que es clave.
R. Sí, lo comentaba. Todos, a cualquiera que se le pregunte, van a tener un ejemplo de alguien que conoce que se ha tenido que ir porque no tenía oportunidades en su pueblo. O bien se ha tenido que venir a Córdoba, o a otra ciudad andaluza, o fuera de la comunidad e incluso fuera de España. Eso lo tenemos que cambiar. Hay gente que por su formación o capacidades no encuentra trabajo aquí, es algo normal y razonable. No podemos tener de todo. Pero sí tendríamos que dejar que la gente pudiese elegir. Que los pueblos se mantengan y se hagan políticas para que el mundo rural tenga un sustento, y sea interesante quedarse en Añora, Dos Torres, Peñarroya o Almedinilla.
P. Yo creo que la clave está en que los precios de la agricultura sean justos. No puede ser que un agricultor cobre 10 céntimos por un kilo de naranjas y en el supermercado cueste casi dos euros.
R. Claro. Son problemáticas que muchas veces están condicionadas a políticas internacionales. Pero es verdad que tenemos que luchar por lo nuestro, por nuestra agricultura, por nuestra ganadería, y ponerla en su sitio. Usar la bandera de la calidad y de la diferenciación. Y ver los canales que sean más apropiados para perder competitividad en el mundo.
P. Le estoy preguntando de todo. Un delegado del Gobierno tiene que manejar todo, ámbitos tan diferentes como la agricultura, la sanidad, la cultura, el turismo, el medio ambiente...
R. Mira, hasta ayer lo llevaba fatal. A partir de ahora que voy a tener seis delegados territoriales lo voy a llevar bastante mejor. La próxima entrevista que me haga los voy a tener aquí sentados y vamos distribuyendo las respuestas (risas).
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