Venganza con tintes vitales
Apenas sin tiempo para haber podido saborear la histórica victoria ante Jimbee Cartagena, el Córdoba Patrimonio de la Humanidad se enfunda de nuevo este fin de semana el mono de trabajo para continuar con su objetivo de permanencia. No hay tiempo que perder y en este caso le toca emprender una de las salidas más importantes de lo que resta de curso. Un viaje con dosis de venganza y necesidad en la maleta de los de Josan González. Las jornadas van sucediendo y cada vez resulta más importante no fallar. El triunfo ante los levantinos permitió a los blanquiverdes escapar de la zona de descenso, y ahora tratarán de refrendar ese salto en un enfrentamiento directo de la zona baja.
El conjunto califa, en décimo cuarta posición, visita al Ribera Navarra, décimo tercero en la tabla, con solo dos puntos de distancia. Un choque, como se ha dicho, directo y que permitiría a los cordobeses subir un nuevo peldaño clasificatorio, acercándose aún más a ese ineludible propósito. Estos son los partidos donde verdaderamente se debe mostrar el carácter sólido del equipo de Josan, que en la primera vuelta ofreció una imagen destacada ante varios de los clubes de arriba, como ahora ha ocurrido con Cartagena, aunque falló en los enfrentamientos de la que es consideraba como su liga. Y justo eso quiere remediar contra los navarros.
El Córdoba Patrimonio recibió al cuadro de José Lucas Mena inmerso en una racha bastante satisfactoria, que había dejado tras de sí importantes empates como el de Palma Futsal o la victoria ante el Barça. En el feudo califa aterrizaba un club de un nivel similar al de los blanquiverdes, aunque eso no se reflejó en cierta manera sobre el parqué, y la recompensa finalmente se fue hacia el norte.
Y es que los locales no entraron nada bien al partido aquel día, pues Navarra puso rápidamente tierra de por medio con dos goles en apenas un minuto de la mano de Mínguez y Uge. Además, el primero de ellos se encargaría de ampliar distancias hasta el 0-3 en el ecuador del partido, dejando una imagen desangelada en la escuadra cordobesa.
Con todo, los de Josan tiraron de orgullo y recortaron distancias en un tramo final frenético. Boyos y Pablo del Moral hicieron soñar con sacar algo positivo de la contienda, aunque aquella reacción llegó tarde. Una caída que escuece viendo el transcurso de las jornadas, y que ahora tratará de hacer olvidar conquistando el Ciudad de Tudela. En busca de la venganza con tintes vitales.
0