Rosa Galisteo venera en su pregón la cultura que emana del corazón de la Fuensanta
Rosa Galisteo ha pregonado en la noche de este jueves la Velá de la Fuensanta, en un emotivo discurso en el que ha defendido la cultura y las actividades que emanan del corazón de un barrio tanto como para cambiarlo. Galisteo, que se ha reconocido como Antonio Manuel Rodríguez Ramos en 2017 como “otra pregonera de pueblo”, recordó sus primeras Velás, aquellas en las que añoraba su infancia en Baena, las fiestas después de la siega en las que salía a recibir a su padre.
En una repleta Plaza del Pocito, la escritora y fundadora de Mucho Cuento, que nació precisamente en la Fuensanta, recordó cómo fue una mujer que se educó tarde, cuando llegó al barrio y pudo matricularse en la escuela de adultos. “Soy una de esas mujeres que no pudo estudiar de pequeña. En aquel centro, a principios de los 90, di con muchas otras en una situación parecida. Durante todo el tiempo en el que asistimos a clase, en el antiguo IBAD junto a la Plaza de la Juventud, fuimos creando un vínculo que nos permitió llevar nuestra formación más allá de las aulas. Fue así como nació la Asociación Cultural Plaza de la Juventud. Con talleres y actividades que las alumnas iban demandando, como el taller de encuadernación, el taller de teatro, el de escritura creativa o el de pintura”, evocaba en un pregón titulado Venerables y en el que ha citado a muchas de las personas de la Fuensanta que la han acompañado en el camino.
“No me faltan motivos para sentirme identificada y agradecida por todo lo que este barrio lleva ofreciéndome desde que lo conozco. Por recibir en él, justo al lado de mi casa, una educación que debería haber obtenido siendo mucho más joven”, agradecía Rosa Galisteo ante muchos de esos vecinos que como ella se han formado y educado gracias precisamente a la solidaridad e inquietud del barrio. “Porque para llegar hoy aquí, sólo necesité una cosa: educación. Y a maestras como Tati Saiz o Paqui Domínguez. Y a maestros como Mariano Valverde, Paco Santiago, Julián Cañizares o Javi Habas”, citó.
“Fue precisamente leyendo la poesía de Lorca, de Alberti y del resto de la Generación del 27, en las clases del Centro de Adultos, cuando nació la idea de crear un taller de escritura”, recordaba. Después, “con Antonio Luis Ginés, viendo el interés que había en aquellas clases por el cuento y el relato corto, surgió una idea más: crear otra asociación dedicada a fomentar ese género literario. Mucho Cuento nació de esta manera”, relató.
Por su parte, la alcaldesa de Córdoba, Isabel Ambrosio, presentó a la pregonera, de la que contó una anécdota. “Joan Margarit visitó Córdoba hace siete años para presentar el que era en aquel momento su último libro. Aquella tarde diluvió en la ciudad, incluso se recomendaba no salir a la calle. Rosa Galisteo fue a la presentación, a la que no asistió nadie más. Al escritor se le preguntó que si quería suspender el acto, a lo que respondió que una persona había acudido para oírle y que él la haría de igual modo. Fue mucho más que una presentación, porque le habló de su obra y le recitó cara a cara sus poemas. Precisamente, el título que ha elegido para el pregón (Venerables) proviene de un poema de Joan Margarit”.
0