RESACA Y SÍNDROME PREMENSTRUAL
Llegar a los treinta sólo es una tragedia si vives en ciertos países de África, porque significa que te quedan seis años más de vida. Pero las estadísticas del siglo XXI indican que a los treinta no hemos llegado aún al intermedio de nuestras vidas. Entonces, ¿por qué nos creemos erróneamente que la vida de una mujer se acaba en la década en la que aparece la celulitis y más si es un domingo con resaca y con el S.P.M. (Síndrome Premenstrual)? En la tercera década de la vida las mujeres nos dividimos en dos grandes grupos: a) Las treintañeras seniles: éstas ya nunca más postularán en llegar a ser Miss Universo y son conscientes de que el príncipe europeo de su generación ya se enamoró de otra plebeya que no era ella. Como NUNCA salen a los bares – porque no tienen vida social – no llegarán a descubrirla.
b) Las adolestreintañeras: guardianas de puertas que solo ellas mismas pueden abrir. Lúcidas que a partir de los treinta gozan mejor del sexo. Aprenden a ganarse la vida sin la ayuda de nadie, eso sí, a base de sabiduría y de “putadones” acumulados.
Y claro, si se sale por los bares al día siguiente, pasa lo que pasa. Y pasa todavía más si, al efecto depresor que tiene la “guarrimezcla” del alcohol sobre nuestro Sistema Nervioso Central, le sumas con que estás con el S.P.M. con sus efectos de depresión, ansiedad e irritabilidad. Te levantarás inquieta, turbada y atormentada. Dormirás intermitentemente durante toda la mañana en la desdicha eterna… Percibirás un dolor intenso y palpitante en la parte posterior de tu cabeza. Notarás bajo tu pelo apelmazado y frito protuberancias de origen desconocido. Al intentar levantarte las punzadas de dolor se extenderán por todo tu cráneo. Sentirás más bien que estás en los lugares más oscuros del reino del infierno. Un reino altamente poblado por “sombras” y almas sin cuerpo que están atrapadas entre la vida y la muerte. Intentarás huir con desdén de esas visiones que acuden a tu mente… cuerpos lujuriosos retorciéndose bajo la tempestad, las almas glotonas obesicas flotando en excrementos, los villanos traidores en la helada garra de Satán.
La locura engendra la locura.
Vislumbrarás a tus pies, vertiginosamente lejos, los taconazos de 15 cm que dejaron tus pies en estado de amputación y necrosis. Con una desesperación y rabia contenida te extinguirá tu última esperanza. Ese es el momento que rezarás para que el mundo recuerde tu nombre, no como el de una pecadora alcoholizada monstruosa, sino para que la humanidad comprenda el legado que dejas tras de tí. Tu legado es el infierno deshidratado. El último paso hacia el abismo. Llorarás por todos las esquinas de tu casa como la “Zarzamora”. Estarás apagada y no le verás sentido a nada. Saldrán todos los “mierdones” de tu vida a la superficie y lo interpretarás todo negativamente. Tu cuerpo estará demacrado, pálido y fatigado. Observarás que experimentas sensibilidad al sonido y a la luz cual vampiro. Experimentarás confusión y dificultad para concentrarte. Y al intentar hurgar en los oscuros recovecos de tu memoria de lo que hiciste la noche anterior, solo percibirás el hedor de la muerte. Al recordar algo te arrastrarás de nuevo a ese profundo pozo del que habías emergido. Serás presa de la barahúnda de no saber si saliste anoche por los bares o por el purgatorio en los cuales se expían los siete pecados capitales: soberbia, envidia, ira, pereza, avaricia, gula y lujuria. El martilleante dolor de tu cabeza te obligará a cerrar tus ojos con restos, todavía, de rímmel corrido y la oscuridad volverá a engullirte en tus desdichas. Una visión familiar acudirá a tu mente: una orilla de un río teñido de sangre, rodeada de cuerpos retorciéndose de dolor. Voces suplicantes y piernas de cuerpos medio enterados boca abajo quedando inertes. ¡Noooo, eso no es!!! Lo que estás recordando en tu memoria son las fotos que colgaste en Facebook, con lo que olvídate de tu dignidad ciber. En tu mente podrás leer una inscripción: “EN ESTE LUGAR, EN ESTA FECHA, EL MUNDO CAMBIÓ PARA SIEMPRE” Para estos domingos resaquiles e infernales, yo recomiendo que la mejor manera de sobrellevarlo – para las solteras – es, no lo dudes, alquilarte un tío de adoptauntiti. com modalidad “dominguero”. Estos titis están diseñados para hacerte una paella dominguera, limpiar tu casa con la paellera, darte un masaje relax, llevarte una peli flipona y entretenida, escuchar todas “tus mierdas” y darte mucho amor y cariño… ¿Acaso no es eso lo que necesitas??? Aunque lo más normal será llamar a tu amig@ del alma a que haga todas esas cosas o te conformarás con compartir tu misma visión de los infiernos, peli y manta. Y como se suele decir todos los domingos resaquiles: "Ya no salgo más ni vuelvo a tomarme una copa más en mi vida".
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