El césped de El Arcángel, un enemigo en casa
El mal estado de la hierba del estadio condicionará el encuentro del Córdoba ante el Lugo | Tras la marcha de Royalverd denunciando “impagos”, el club protege la instalación
Quienes lo padecen lo han denunciado, cada cual a su modo y según sus circunstancias. Los profesionales del Córdoba CF se quejan -al menos, en público- con un tono más comedido. Los que lo han sufrido como visitantes han sido más explícitos. Ya lo dejó dicho Paco Jémez en la sala de prensa después del partido de presentación de los blanquiverdes ante el Granada. “Así es imposible jugar”, declaró el técnico nazarí. Después dejó su puyita también Pep Martí, responsable del Tenerife, en la primera jornada de Liga. El césped de El Arcángel está fatal.
El club ha protegido la instalación en las últimas semanas, trasladando incluso el entrenamiento prepartido de la pasada jornada a la Ciudad Deportiva, donde la plantilla sigue entrenándose -y seguirá, al menos una semana más- en régimen de clausura. El próximo viernes, sin embargo, no hay más remedio que volver a casa y pisar ese césped lleno de calvas y mataduras, cuyos trozos se desprenden de modo dramático en cuando a algún jugador se le ocurre despejar a ras de hierba.
Las altas temperaturas que ha sufrido la ciudad tienen bastante que ver en el asunto, aunque parece claro que el fin de la relación del club con la empresa Royalverd, encargada del cuidado del césped, también ha pesado lo suyo en el triste aspecto que enseña la alfombra de El Arcángel. Royalverd anunció que se desvinculaba del club por los reiterados impagos, según expuso de manera pública. El Córdoba CF no se ha pronunciado al respecto. Mientras tanto, el hogar del Córdoba CF sigue con problemas. Y graves. De hecho, el primer equipo lleva casi dos semanas sin entrenar en el estadio, que sólo ha acogido dos partidos de competición. El de la primera jornada de Segunda ante el Tenerife y el de la segunda jornada de la Segunda B, que disputó el pasado domingo el filial frente al Cartagena. Varios operarios actuaron antes y durante el partido sobre las zonas más dañadas.
Los trozos de césped levantados, más allá de consideraciones estéticas y condicionamiento del bote del balón, resultan un factor de riesgo para los futbolistas como desencadenantes de lesiones. El Arcángel sigue reservado y el anuncio de una bajada de temperaturas ha causado cierto alivio en el club, aunque parece evidente que no todo es achacable al calor veraniego. En otras ciudades andaluzas se registran temperaturas similares y el césped de sus campos no aparece tan dañado como el de la instalación cordobesa. El Córdoba ha anunciado su plan de entrenamientos semanas y en él contempla, como ha venido siendo habitual, una última sesión previa al partido en El Arcángel. El sábado pasado se optó por trasladarla a la Ciudad Deportiva Rafael Gómez. Habrá que ver qué sucede esta vez. Porque el viernes, a las nueve de la noche, hay partido.
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