Córdoba CF - Atlético Baleares
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Crónica
El Córdoba CF mantiene un destino fijo
Ya va quedando menos y ya no solo cuenta lo que se ve en el césped de El Arcángel, sino que hay que poner la mirada en los rivales más directos, en este caso Ibiza y Castellón para poder soñar con las dos primeras plazas del Grupo II de Primera RFEF. Sin embargo, primero hay que resolver el trabajo que afecta a uno mismo y el Córdoba CF abría las puertas del coliseo ribereño para recibir a un Atlético Baleares que, a pesar de necesitar los tres puntos con el objetivo de conseguir la permanencia, planteó un partido muy parecido al visto en territorio mallorquín.
No era un encuentro normal y así se demostró justo antes de empezar. El Arcángel se enmudeció para rendir homenaje a la madre de uno de los suyos, de un Alberto Toril que se ha ausentado de la disciplina blanquiverde por motivos obvios y que obliga a dejar a un lado la rutina para centrar todos sus esfuerzos en lo que realmente importa, en la familia. Por ello, el vestuario califal tenía una razón más para vencer al Atlético Baleares y así lo demostró en los primeros minutos, imponiendo un estilo de juego fiel a su filosofía, pero en frente tenía uno de sus mayores enemigos: la defensa replegada.
Gracias a esto, al Córdoba CF le costó un mundo entrar en el partido, ya que los espacios en el campo rival brillaban por su ausencia. Al menos, la defensa blanquiverde vivía tranquila, pero ese no era el principal objetivo de unos califas que tuvieron que esperar hasta el minuto 20 para encontrar unos espacios que, a la postre, significaron el primero del partido. Por un lado, Kuki Zalazar probó con un disparo desde el borde del área a un Ramón Vilá que pudo atajar el intento del uruguayo con una preciosa estirada, pero no sirvió para nada, ya que, una jugada después, Diarra aprovechó un centro medido de Lapeña para inaugurar el marcador de El Arcángel.
Esto hizo que el partido cambiase completamente, ya que el Atlético Baleares tenía que abrirse, dejando su fortaleza prácticamente en su área para tratar de puntuar, más aún cuando necesitan tres puntos para tratar de conseguir la salvación en Primera RFEF. Gracias a esto, Nuha tuvo dos acercamientos que terminaron en nada gracias a la intervención de Carlos García, mientras que, por su parte, el Córdoba CF estrelló dos balones a la madera después de sendos disparos de Antonio Casas y Albarrán, pero la nota de la primera mitad no fueron finalmente los goles, sino que Simo estuvo a punto de caer por el foso de la grada de tribuna tras un choque con David Navarro. Afortunadamente, el blanquiverde pudo reincorporarse sin lastimar ningún daño justo antes de que el colegiado mandase a los 22 jugadores al túnel de vestuarios.
La reanudación tranquilizó el ambiente, enturbiado por la última acción a Simo. Los vestuarios sirvieron para relajar la tensión vivida durante la primera parte, con un insuficiente marcador para un Córdoba CF que necesitaba aumentar la distancia para que el Atlético Baleares no tuviera ninguna opción en el duelo. Sin embargo, el dominio blanquiverde no se transformaba en ocasiones con demasiado peligro, de hecho fue el propio conjunto balear el que tuvo un acercamiento importante por medio de Nuha Marong cuyo disparo fue repelido por Carlos Marín.
A partir de aquí, el Córdoba CF comenzó a dominar pero con más decisión, poniendo una marcha más en el partido para terminar de cerrarlo. Además, el Atlético Baleares quería creerse que podía sumar algún que otro punto en El Arcángel, aunque pronto vio que no iba a ser así. Álex Sala cogió el balón en la medular, avanzó unos cuantos metros y puso el esférico a la escuadra de la portería defendida por Ramón Vila, haciendo estallar de júbilo a los más de 10.000 cordobesistas que agolparon las gradas del coliseo ribereño.
Aunque el segundo tanto local llegó 30 minutos antes de que terminase, el partido acabó sin pena ni gloria, con un Atlético Baleares que lo siguió intentando, mientras que el Córdoba CF quiso hacer más sangre, pero el marcador ya no se movería más. La entidad blanquiverde consigue una nueva victoria en El Arcángel y aprovecha el empate del Ibiza para colocarse a tan solo dos puntos de la segunda plaza del Grupo II de Primera RFEF. Además, se encuentra a la espera de lo que haga el Castellón en su visita a Alcoy. El barco empieza a zarpar con un destino fijo: Segunda División.
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