Antes de elegir un simple cinturón, una barra de labios o el pantalón de la nueva temporada (temas habituales de este blog), deberíamos entrenar la musculatura del gusto con la exposición ‘Tres mujeres Magnum: Eve Arnold, Inge Morath y Cristina García Rodero’, que permanecerá abierta en el Centro Niemeyer (Avilés) hasta el 30 de enero de 2022.
La belleza que solamente atrapa el disparo fotográfico, filtrada desde la mirada magistral de Arnold, Morath y García Rodero, es alta proteína para nuestra sensibilidad, de modo que contemplar su obra ha sido una de las mejores apuestas de mis vacaciones en Asturias, tan diversa y audaz para enriquecer la portuaria Avilés desde la factoría cultural del Centro Niemeyer, al que apetece acudir, fashionnismo mediante, con atuendo de TOGA Archives y otros sueños de vanguardia.
Fotografías icónicas como las de Marilyn Monroe en el rodaje de Vidas Rebeldes, el retrato Malcolm X, Paul Newman en el ‘Actors Studio’ o del carnaval en Haiti han sido realizadas por mujeres (todos deberíamos saberlo), concretamente tres pioneras de la agencia Magnum, Eve Arnold, Inge Morath y la española Cristina García Rodero, a quienes rinde tributo esta exposición imprescindible comisariada por Rosa Olivares.
Hay que subrayar, según recoge el texto de la muestra, que Eve Arnold (Filadelfia, Estados Unidos, 1912 – Londres, Reino Unido, 2012) “fue la primera mujer que entra en la agencia Magnum como miembro de pleno derecho. Lo hace en 1951 con 39 años. Hasta cuatro años después, 1955, no entraría la segunda mujer, Ingeborg (Inge) Morath (Graz, Austria, 1923-Nueva York, Estados Unidos, 2002). Para que entrase un fotógrafo español habría que esperar 50 años, y sería una mujer: Cristina García Rodero (Puertollano, Ciudad Real, 1949)”, cuya participación como jurado en el Concurso Nacional de Fotografía de Córdoba Premio Mezquita de 2016, así como en la 17ª Bienal de Fotografía de Córdoba con la muestra ‘Tierra de Sueños’ (valga mi inciso), es un orgullo para la ciudad. “Hoy día en la agencia Magnum hay 99 fotógrafos representados, de ellos solamente 17 son mujeres”, ratio que hace aún más necesario que la Fundación Inge Morath mantenga una beca para jóvenes fotógrafas.
En mi visita a ‘Tres Mujeres Magnum’ quedé deslumbrada y embobada por todas las fotografías, y por el hecho de que el perfil y las frases de sus autoras consiguen acercar el corazón y la sensibilidad de quienes las realizaron; ellas desvelan personas y fragmentos del mundo al tiempo que desnudan su propia mirada.
El autorretrato de Cristina García Rodero, cual inalcanzable portada de Vogue, ha sido mi trampolín para sumergirme en una muestra que enseña a mirar lo relevante: la familia humana; la lucha histórica y aún inacabada de las mujeres; los derechos humanos de todos; la resistencia de las personas frente a la opresión y el dolor; nuestra esperanza y nuestra solidaridad, y todos los instantes, palabras, imágenes y gestos simbólicos y decisivos que ascienden al olimpo de la memoria personal y colectiva.
Nota: Las menciones a marcas y productos no llevan aparejada ninguna contraprestación
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