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Sindicatos y mareas cortan la calle para reclamar más plantilla y mejores condiciones para los profesionales sanitarios

Manifestación en defensa a la Atención Primaria

Juan Velasco

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Un centenar de personas, simpatizantes y afiliados a diferentes colectivos sanitarios y sindicatos han protagonizado este lunes una movlización en la capital cordobesa para exigir a la Junta de Andalucía mejoras en las condiciones laborales de los profesionales sanitarios y un refuerzo urgente de las plantillas.

La protesta, enmarcada dentro del calendario de movilizaciones previas a la gran marcha convocada para el sábado 5 de abril en Sevilla, ha cortado la vía pública en su trayecto desde la Delegación de Salud y Consumo a la Delegación del Gobierno Andaluz en Córdoba, con cánticos como “Moreno Bonilla, queremos más plantilla” o “Qué barbaridad, el dinero de la pública se va a la privá”.

En declaraciones a los periodistas antes de iniciarse la marcha, Antonio Baena, portavoz de las Mareas Blancas de Córdoba, ha expresado su indignación ante la falta de recursos y la gestión de la sanidad andaluza: “Cada cifra que nos dan en las listas de espera representa a una persona que sufre. No podemos banalizar los números porque detrás hay vidas en juego”.

Baena ha denunciado además la falta de contrataciones, el deterioro de los servicios sanitarios y el traspaso de fondos públicos a la sanidad privada. “Lo que pedimos no es un lujo, sino recuperar la sanidad que teníamos hace siete años, cuando conseguíamos cita con rapidez y las operaciones se realizaban en hospitales cercanos. Ahora el colapso es total, y la ciudadanía está pagando las consecuencias de una gestión ineficaz”, ha añadido.

Por su parte, José Damas, secretario provincial de CCOO de Sanidad, ha criticado la falta de cumplimiento de los acuerdos firmados en 2021 sobre la carrera profesional y la mejora de la atención primaria. “La Junta dice que la sanidad en Córdoba está bien, pero los datos desmienten esa versión. En seis meses, las listas de espera han crecido en más de 9.500 personas, alcanzando un total de 73.000 pacientes en espera”, señaló Damas. También ha denunciado que “se están derivando más de mil millones de euros a la sanidad privada mientras se reduce la plantilla del Servicio Andaluz de Salud (SAS) en 1.329 profesionales”. Además, ha destacado la situación de infrautilización de varios hospitales y centros de salud: “El Hospital de Palma del Río apenas funciona desde 2022, el Hospital de Montilla tiene quirófanos operando a menos del 50%, y la tercera sala de urgencias sigue sin médicos disponibles”.

Antonio López, portavoz de CSIF Sanidad, ha denunciado la precariedad laboral que sufren los trabajadores del sector, lo que ha provocado la fuga de profesionales a otras comunidades autónomas en busca de mejores condiciones. “No es que nos quiten a los médicos, es que se van porque aquí no tienen buenas condiciones. Llevamos dos años esperando que se cumplan los pactos de bolsa y la carrera profesional. Además, hay un problema con la creciente lista de espera en consultas hospitalarias, atención primaria y quirófanos”, ha afirmado López. Según el portavoz, “se está destinando dinero público a conciertos con hospitales privados en lugar de invertir en recursos propios del SAS, lo que supone una mala gestión del presupuesto”.

Desde el Sindicato de Enfermería Satse, Rafael Osuna ha insistido en que Córdoba y Andalucía presentan la peor ratio de sanitarios por habitante en todo el país, lo que genera un “cuello de botella” en la atención sanitaria. “Si una fábrica tiene demanda, contrata más empleados y aumenta la producción. En sanidad ocurre lo contrario: tenemos listas de espera de meses y en lugar de reforzar el personal, se producen despidos”, ha criticado Osuna. También ha alertado de la necesidad de estrategias efectivas para captar y retener talento: “La falta de incentivos laborales hace que los sanitarios se marchen y la administración no está haciendo nada para frenar esta fuga de profesionales. Es necesario garantizar estabilidad y mejorar los sueldos para equipararnos con otras comunidades autónomas”.

Finalmente, Francisco Juan Ferrada, delegado de UGT en el Área Sur Sanitaria de Córdoba, ha subrayado que la manifestación de hoy es la antesala de una gran protesta que se llevará a cabo el próximo 5 de abril en Sevilla. “Llevamos más de dos años denunciando el deterioro de la sanidad pública y reclamando la fidelización del personal sanitario. La Junta debe escuchar a la ciudadanía y atender nuestras demandas antes de que la situación sea irreversible”, ha concluido Ferrada. También ha puesto como ejemplo la falta de inversión en infraestructuras: “Quirófanos cerrados en hospitales públicos mientras las operaciones se derivan a centros privados con mayor rapidez. Esto demuestra que la sanidad pública está siendo desmantelada en favor del sector privado”.

Las movilizaciones continúan y los sindicatos advierten que seguirán con las protestas hasta que se tomen medidas efectivas para revertir el deterioro del sistema sanitario andaluz. Los convocantes han llamado a la ciudadanía a sumarse a la gran manifestación del 5 de abril en Sevilla, donde esperan una asistencia masiva para exigir soluciones inmediatas.

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