El 'Oktoberfest' ya tiene un primo cordobés que solo hace cerveza artesana

Octubre es el mes de la cerveza. Lo es en Múnich, con el Oktoberfest, y ahora lo va a ser en Córdoba con el I Festival de la Cerveza Artesanal, celebrado este sábado. Claro que el calibre -en todo- es mas pequeño en el ámbito andaluz. Hay menos espacio (apenas siete mostradores y un escenario con apenas instalaciones municipales), menos gente que en Alemania (aunque se han desbordado las previsiones) y menos tamaño de las jarras (ha vuelto a optarse, en lo general, por un desangelado vaso de plástico). Pero, oye, la misma ilusión y, sobre todo, las mismas ganas de beber cerveza.

Y la servesa cordobesa que hoy celebra su día es, recuérdalo, artesana. Es decir, 100% salida de las fábricas tradicionales que, como espuma de lager, han retrepado por el mapa de la ciudad durante los últimos años. El auge de este tipo de bebidas tradicionales se ha notado, sobre todo, en la asistencia de público que este sábado han abarrotado todos los espacios con sombra que dejaban los alrededores de la Corredera.

Una de las marcas pioneras fue Cervezas Califa. Surgió hace cinco años y, de una pequeña fábrica con bar -justo en frente del Conservatorio Superior de Música- ha pasado a tener dos locales más en el Vial Norte y en la Pérgola de los Jardines del Duque de Rivas. Entre unas cosas y otras, además, ha impulsado junto a Bandolera del Sur, el I Primer Festival de la Cerveza Artesana de Córdoba.

La primera idea era hacer un encuentro de carácter andaluz, pero las restricciones en la organización (por el espacio y sus características) ha hecho que esta primera edición se haya circunscrito solo a la provincia. De esta forma, junto a Califa, se encuentran cervezas Capitán, Judería, Alma, Bandolera del Sur, La Gitanilla Beer Factory y Perro Flaco & Co.

“Hace cinco años éramos muy pocas las fábricas artesanales en Córdoba pero ha habido un auge y está claro que estamos aquí para quedarnos”, explica Alejandro Díaz, uno de los gerentes de Cervezas Califa. “Las nuevas marcas generan riqueza y es bueno para todos. Las grandes fabricantes ya están tomando nota”, termina. Y más que tomarán cuando el certamen, que aspira a ser anual, se repita el año que viene, tal y como quieren los organizadores.