La suplencia es más llevadera si las cosas marchan bien

El buen momento que atraviesa el Córdoba hace difícil la participación de algunos jugadores, entre ellos un Juan Carlos que asume su rol

El Córdoba es segundo, sólo ha perdido un partido y apenas ha encajado tres goles. Con esos guarismos, es lógico que Pablo Villa no introduzca cambios en un once que está mucho más que asentado y que empieza a conocer de memoria todo el mundo. Sólo las bajas por lesión o sanción han abierto el paso a otros futbolistas, y a pesar de esas modificaciones el equipo ha mantenido la seriedad sobre el campo. Pero no se producen más allá de esa circunstancia. Se cumple en el conjunto blanquiverde esa máxima de que cuando las cosas funcionan no se debe tocar nada. Es algo que tiene claro el técnico y también los propios jugadores, si bien no deja de ser complicada la tarea de asumir el rol de suplente. Situación que atraviesa, entre otros, Juan Carlos, que encima no tendrá la oportunidad de gozar de minutos en Copa tras la eliminación del torneo del KO por parte del Deportivo de la Coruña.

Con todo, el guardameta entiende a la perfección que su entrada en el equipo sea, a día de hoy y con las estadísticas que logra Saizar bajo palos, misión casi imposible. “Todos queremos jugar, pero la verdad es que estoy muy contento, porque estamos segundos y el año ha empezado muy bien. Estamos en una dinámica muy buena y sí que es una pena no poder participar más, pero es que ahora mismo estoy contento porque lo realmente importante es el equipo y al final es lo que a todos nos va a poner en un sitio o en otro”, comentó al respecto. En este sentido, aseguró que “mi primer objetivo desde que llegué es tratar de ayudar al Córdoba y al grupo para que avance” y señaló que “ahora mismo las cosas van muy bien y cuando las cosas van bien hay que intentar no tocar mucho”. Más que nada “porque la dinámica que llevamos es buena y hay que mantenerla, sobre todo en una competición tan larga”.

Aun así, se mostró claro a la hora de indicar que “cualquier jugador que se siente aquí (sala de prensa) y diga que no quiere jugar te está engañando, todos queremos jugar”, aunque esta circunstancia tiene una consecuencia positiva, puesto que “hace que los que no estamos jugando habitualmente apretemos más y los que están jugando también para mantener el puesto y eso al final es bueno para todos y sobre todo para el Córdoba”. En cuanto a su rol dentro del equipo, expresó que “no me considero ni segundo ni primer portero, me considero un jugador del Córdoba”, de forma que “lo único que quiero es que las lesiones me respeten para poder trabajar y ayudar, lo único que intento es trabajar día a día para tratar de hacerlo mejor y de convencer al míster para que confíe en mí”.

Por otro lado, lamentó la eliminación en Copa, algo que no le dificultará contar con minutos. “Todo lo que sea competir está claro que es bueno, pero disfruto con mi trabajo, me gusta mucho lo que hago, que es lo que siempre he querido”, expuso para añadir que “sí que es verdad que daría un empujón tener otro tipo de competición”. Sea como fuere, lo más importante para Juan Carlos está en el colectivo, y ahí destacó la buena relación existente en el vestuario, entre jugadores y en el cuerpo técnico. “Hay un grupo de personas muy bueno y cuando la gente está a gusto se nota en el campo, porque todo el mundo trabaja en la misma dirección y eso es bastante importante”, señaló. El portero, en otro orden de cosas, prefirió no entrar en exceso en aquel caso de posible amaño que le salpicó el pasado verano, puesto que aseguró tener “la conciencia tranquila”, si bien admitió que al comienzo de la temporada “eso no me ha ayudado desde luego”.