Iván Ania fue expulsado por decirle al árbitro “que se ponga las gafas de palo”

No suele ser un entrenador que caiga en protestas excesivas ni aireadas. Más bien, al menos en su relación con los árbitros, su talante es más tranquilo y algo conservador, al tiempo que en relación con las instrucciones hacia sus jugadores, sí que suele ser un preparador muy activo y que está constantemente dando señales.

Ese suele ser el perfil de Iván Ania en cada partido, aunque la actuación de este domingo en el Nuevo Mirandilla ha sido tan desesperante en clave blanquiverde, que ha hecho que incluso el técnico califa acabara en la zona de vestuarios antes del pitido final. En efecto, el choque se ha resuelto con un 2-0 para el Cádiz CF, resultado que llegó tras dos acciones un tanto curiosas. La primera fue un gol tras un penalti pitado previa revisión en el VAR, mientras que el segundo se confirmó igualmente a través de dicha tecnología, aunque queda la polémica sobre si el balón pasó completamente la línea o no.

Sea como sea, la actuación arbitral parece que sacó de quicio a Ania, que acabó expulsado con roja directa en la recta final del encuentro. Concretamente, su marcha se produjo en el minuto 90, después de que el juez de línea llamase al árbitro principal a raíz de unos comentarios efectuados por el entrenador visitante. Es más, el propio preparador asturiano ha reconocido en sala de prensa que sí que hizo un comentario, aunque no ha detallado concretamente cuál fue.

Sea como sea, en el acta del partido, el árbitro ha precisado que Ania fue expulsado con roja directa por realizar un gesto simulando con sus manos unas gafas, diciendo en repetidas ocasiones: “que se ponga las gafas de palo”. Todo ello sería al respecto de una acción que generó contrariedad con la opinión del entrenador cordobesista, que tras esta roja no podrá sentarse en el banquillo en el encuentro de la próxima jornada en El Arcángel ante el Zaragoza.