Córdoba CF
Los ecos de un ascenso: amores compartidos, despedidas susurradas
La magnitud de la gesta fue reconocida con una celebración de altura. No era para menos. El Córdoba CF regresa al fútbol profesional un lustro después, aunque la fiesta ha dejado ecos significativos, ya que en muchos sentidos, la mente está puesta ya en la siguiente temporada, tanto desde el prisma institucional como del lado más popular. El propio Monterrubio ya ha asegurado en cada intervención pública que el club quiere más y el reto es volver a Primera División lo antes posible. Es por ello que, en plena fiesta de la promoción, hay cierto sector que tiene también la mente puesta en la siguiente campaña. Y es que no es para menos, ya que el momento más álgido del curso, coincide además con una amplia amalgama de sentimientos encontrados. De amores compartidos. De despedidas susurradas. Los que están, los que se quedan y los que dicen adiós.
La dirección deportiva lleva varios meses trabajando con determinados jugadores para ver su situación dentro del plantel de cara a la 2024-25. Son conocidas las negociaciones con futbolistas como Diarra, Calderón, Simo o Carlos Marín, quienes, entre otros, acaban contrato este próximo 30 de junio. En este sentido, ya se sabe que Iván Ania seguirá al frente del equipo al renovar por objetivos, al tiempo que el guardameta también confirmó durante la celebración que iba a continuar dos temporadas más como blanquiverde. Esos son los amores encontrados. Ahora también se puede abrir la vía de las despedidas.
Isma Ruiz fue uno de los grandes agitadores de la fiesta y no cabe duda que, aunque tiene contrato en vigor, su gran temporada y su juventud hará que tenga suculentas ofertas en el mercado. Eso sí, el jugador reconoció que aunque es granadino de sentimiento, este año se ha sentido “un cordobés más”, por lo que su continuidad estaría muy bien encarrilada. Algo más de incertidumbre hay en el caso de Álex Sala, principalmente porque el centrocampista se encuentra cedido por el Girona FC. Eso sí, el jugador ya ha admitido en más de una ocasión que le gustaría seguir en el Córdoba CF, y este mismo lunes, ante la petición de los aficionados presentes en Las Tendillas, el propio jugador se animó a cantar eso de “Sala quédate”.
En el polo opuesto se encuentra el caso de Alberto Toril. El héroe del ascenso fue uno de los principales protagonistas igualmente durante la celebración, pero su mensaje a la afición sonó más a despedida que a otra cosa. Bien es cierto que su caso se encuentra en plena negociación, pero ya se conoce que dispone de ofertas del extranjero. El ariete, pese a que los ficionados corearon eso de “Toril quédate”, fue comedido en su mensaje y dio las gracias “a todo el cordobesismo, que me han ofrecido lo mejor y les deseo lo mejor en el futuro”. También parece que el caso de Simo suena a despedida, dado que el extremo, aunque hay interés del club en que renueve, tendría la mente puesta en nuevos retos en Segunda División. El futbolista agradeció “por estos tres años que he estado aquí, conecté con ellos desde que llegué. Vosotros me queréis a mí, pero yo a vosotros mucho más”. Otro caso que puede ser una despedida susurrada. Es más, en sus redes sociales ya dejó algún mensaje que suena como un adiós.
En el mismo sentido se encuentra la situación de Diarra, otro de esos asuntos espinosos. No hay duda que la entidad quiere mantenerle, ya que ha sido una pieza angular para Iván Ania desde el principio y así se ha negociado desde hace meses. No obstante, el jugador también tiene grandes ofertas de Segunda y en la fiesta de Tendillas, pese a ese “Yusi quédate”, indicó que “desde el primer día me habéis tratado como uno más y aquí estoy súper contento”. Pero la firma aún tendrá que concretarse.
Sin duda, uno de los momentos más emotivos llegó con la intervención de Gudelj, quien ha vivido uno de los años más duros de su vida. “En Córdoba me dejé la vida y aquí he vuelto a nacer”, puntualizó el jugador, a quien los presentes también pidieron que siguiera de blanquiverde, aunque su situación es más especial si cabe, dado que sus problemas de salud dificultarían que continuara en el fútbol profesional. Aún así, podría seguir ligado a la entidad, ya que reconoció que se siente “un cordobés más”.
En definitiva, estos los asuntos más importantes a día de hoy para la dirección deportiva, que tiene un arduo trabajo por delante a la hora de confeccionar la plantilla. No hay duda que estos jugadores se han ganado el derecho a estar en Segunda División, aunque ese mismo rendimiento hará que tengan ofertas con las que será complicado pelear. Todo ello en la tesitura de tener que afrontar la exigencia de una categoría profesional con altas garantías. Son los ecos de una celebración dorada, entre amores compartidos y despedidas susurradas.
0