La plataforma Stop Desahucios denuncia amenazas de bancos y fondos buitre contra familias

La plataforma Stop Desahucios se ha manifestado en la mañana de este viernes a las puertas de la sede del banco Cajasur en Córdoba, con el objetivo de denunciar la situación de cuatro familias que han recibido amenazas por parte de fondos buitre a los que el banco ha vendido su préstamo, según han relatado a los medios.

La portavoz de la plataforma, Rocío López, ha señalado que denuncian “las malas prácticas, los abusos, el acoso y la falta de información de los bancos, de los fondos buitre y de las gestoras de recobro de deuda y gestoras de inmuebles”. Unas empresas a las que ha señalado directamente, “estas malas prácticas se denuncian en Cajasur, el fondo buitre Promontoria Lezama y en dos gestoras de recobro de deuda, Finsolutia y Axactor. Están acosando a estas familias”.

Según ha explicado, dos familias han accedido a la oficina bancaria para demandar “un negociador para encontrar una alternativa habitacional”. Otros dos afectados se encontraban en la calle puesto que ya no mantienen interlocución directa con Cajasur, al haber vendido la entidad su préstamos a un fondo buitre, ha recalcado la portavoz.

Amenazas y coacciones

Estos “métodos más agresivos”, como los define López, los ha corroborado una de las afectadas, Charo Buendía. “Nos decían que cuando llegáramos a casa iban a estar allí con los nuevos dueños del piso. He llegado a tener miedo y cuando les decía que se estaban pasando, me decían que tengo la piel muy fina”, ha denunciado.

“La administración no está asumiendo la responsabilidad que tiene respecto a la vivienda. Hay listas de espera de 10 años, nosotros llevamos solo dos. Tiene que haber alguna alternativa por parte de los que nos han tratado tan miserablemente”, ha añadido su marido.

Por su parte, otra de las afectadas, Rosa Soria ha comentado que “de la noche a la mañana nos encontramos con una deuda de 240.000 euros que no podíamos afrontar. Ante el miedo y las amenazas, y estando mal asesorados pedimos un préstamo a Cajasur. Se nos concedió un préstamo de 240.000 euros a dos personas que estábamos paradas”. Ahora piden una alternativa, porque aseguran que ellos quieren pagar.

“Los tratan como a delincuentes y son personas que, como a nosotros, se les tuerce la vida un día”, ha defendido la portavoz de la plataforma. Además, ha incidido en que existe “un fondo de aporofobia, tanto en el trato de los bancos como de los medios de comunicación a las familias. Ese mensaje ha calado bastante en la sociedad, por desgracia”.