Convivencia y misiles balísticos de largo alcance

Córdoba es símbolo del diálogo intercultural

Isabel Albás — Concejala de Cultura

Córdoba aspirará a convertirse en la Capital Mediterránea de la Cultura y el Diálogo en 2027. Así lo propone la moción aprobada por el Ayuntamiento días atrás con el voto contrario (como viene siendo lógico) de Vox. El texto, presentado por la Concejalía de Cultura, que dirige la señora Albás, recuerda que la ciudad es un “símbolo del diálogo intercultural”, con una historia que refleja la “convivencia de diversas tradiciones” religiosas y filosóficas.

Como usted sabe, Córdoba lleva décadas cimentando una imagen internacional de ciudad de la paz y la no violencia, gracias al paradigma histórico de las tres religiones que lograron coexistir bajo el paraguas de Al Andalus. Y al tiempo que con una mano teje un referente universal de convivencia y resolución pacífica de los conflictos, con la otra promueve uno de los emporios militares más relevantes del sur de Europa.

¿Se puede soplar y sorber a la vez? Por lo visto sí. Para empezar, ya estamos construyendo lanzacohetes de tecnología israelí como la que despedaza cada día el cuerpo famélico de cientos de niños en Gaza. Misiles inteligentes con capacidad para pulverizar hospitales a 150 kilómetros de distancia. Que oiga. Y la compañía Santa Bárbara Sistemas ya ha anunciado también su intención de establecerse en Rabanales para fabricar previsiblemente sus fabulosos blindados Pizarro.

Y así, misil a misil, iremos reforzando nuestra solvente proyección mundial de ciudad de la paz y potencia de tiro de largo alcance. Porque, queridos amigos, el diálogo que no venga acompañado de bombas de racimo y fósforo blanco es demagogia barata de flower power. Y ustedes me entienden.