¡Vuelve el Joker!

Regresa el segundo payaso más temido del séptimo arte. Vuelve el comediante. El bromista. El burlón. Vuelve Arthur Fleck. Un hombre fracasado que descendió a la locura y el nihilismo, desde donde inspiró una violenta revolución contracultural contra los ricos en la imaginaria Gotham City. Regresa el Joker a las salas de cine. Un fin de semana, en teoría, de taquillazo para los estrenos cinematográficos, y en el que el protagonismo, como era de esperar, se lo llevará el enemigo más conocido de Batman, que vuelve a la gran pantalla, nuevamente, alejado del hombre murciélago para continuar su particular historia.

Todd Phillips (Resacón en las Vegas), Scott Silver (8 millas) y Joaquin Phoenix (Gladiator) se dan de nuevo la mano para otra apasionante aventura con Joker: Folie à Deux. Cinco años después de Joker, película que en su día revolucionó el universo de DC Comics, al igual que lo haría Nolan años atrás con su trilogía de Batman, el payaso más conocido en el mundo de los superhéroes vuelve a las andadas. Encabezados de nuevo por el inconmensurable Phoenix y con un reparto prácticamente renovado, donde repite igualmente Zazie Beetz (Deadpool 2). En este caso se unen nombres de la talla de Brendan Gleeson (Braveheart), Catherine Keener (Déjame salir) y, principalmente, una Lady Gaga (Ha nacido una estrella) que encarna el papel de Harley Quinn, la archiconocida cómplice y novia del Joker.

Tras crear el caos, en esta secuela Arthur Fleck ha sido internado en Arkham a la espera del juicio por sus crímenes como Joker. Mientras lidia con su doble identidad, Arthur no sólo se topa con el amor verdadero, sino que también descubre la música que siempre ha estado dentro de él. 

Marc Forster (Guerra Mundial Z) se sumerge en el drama familiar con tintes bélicos de la mano de Alas blancas, una especie de precuela de Wonder, la cinta dirigida en 2017 por Stephen Chbosky, y protagonizada por Jacob Tremblay (La habitación), Julia Roberts (Pretty Woman) y Owen Wilson (Midnight in Paris), basada a su vez en la novela gráfica de RJ Palacio. En este caso, la trama se centra en Bryce Gheisar (Tu mejor amigo), quien recupera su papel de Julian en una intrahistoria donde se conjugan igualmente los personajes de la debutante Ariella Glaser o Helen Mirren (Barbie).

Julian lucha por pertenecer a un grupo desde que fue expulsado de su antiguo colegio por maltratar a Auggie Pullman. Para transformar su vida, su abuela le revela su propia historia de valentía: durante su juventud en la Francia ocupada por los nazis, un chico le protegió arriesgando su propia vida. Ambos encontrarán el primer amor en un asombroso y mágico mundo de su propia creación, mientras la madre del chico lo arriesgará todo para mantenerlos a salvo.

Más drama, pero con acento español, en la nueva obra de Pilar Palomero (Las niñas), quien dirige y escribe Los destellos, una oda a la madurez cinematográfica, que ya ha sido calificada como su mejor película hasta la fecha, y donde la realizadora se apoya en dos titanes de la talla de Patricia López Arnaiz (Mientras dure la guerra) y Antonio de la Torre (La isla mínima). Palomero, en una ejercicio tan intenso como cálido, narra la vida de Isabel, la cual da un inesperado giro el día en que su hija Madalen le pide que visite regularmente a Ramón, que se encuentra enfermo. Tras quince años alejada de su exmarido, un hombre al que ve como a un desconocido pese a que fueron familia durante años, en Isabel comienzan a reavivarse resentimientos que creía superados. Sin embargo, al acompañar a Ramón en su momento más vulnerable, Isabel conseguirá ver con otros ojos el fracaso que vivieron para centrarse en el presente de su propia vida.

Siete mujeres mayores tienen un sueño. Pepa, Antoñita, Pepi, Esperanza, Remedios, Kiska, Catalina y Rafaela son unas sevillanas del barrio de Triana de entre 68 y 97 años. Todas comparten un mismo deseo: quieren ser monologuistas, triunfar en el mundo del espectáculo y reivindicar que las mujeres mayores merecen respeto y visibilidad. Para ello, han creado un espectáculo titulado: Orgullo Vieja.

Ese es el nombre que recibe este documental que viaja entre la comedia y el drama, dirigido por Chema Rodríguez (Los gigantes no existen), quien pone el foco en la historia de este grupo de mujeres valientes, que no tienen otra pretensión que cumplir su sueño. Da igual la edad, si hay aún un deseo que hacer realidad.

De la producción española, a la canadiense. Ally Pankiw (Feel good) dirige Antes era divertido, una comedia dramática donde cuenta la historia de Sam Cowell, caracterizada por Rachel Sennott (Descifrando a Susie), la cual es una joven aspirante a comediante de stand-up y niñera que lucha con el trastorno de estrés postraumático, mientras decide si unirse o no a la búsqueda de Brooke, una adolescente desaparecida a la que solía cuidar.

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