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Slow Fashion: Pasos realistas para decir adiós al Fast Fashion de forma definitiva

Moda rápida.

Cordópolis Brand

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Durante años, la moda rápida ha sido dueña y señora de muchas tiendas de ropa en todo el mundo. La ventaja está en los precios bajos y las tendencias que se renuevan con cada estación.

Desafortunadamente, detrás de estos precios bajos hay un precio a pagar, y generalmente lo pagan las personas de países en vías de desarrollo, y el planeta tierra en sí.

Esto no parece afectar al mercado. De hecho, se estima que la industria de la moda rápida experimente una tendencia creciente general en los próximos años, hasta situarse en torno a los 180.000 millones en 2030.

Si te interesa tomar mejores decisiones de compra, continúa leyendo.

¿Por qué deberías optar por la moda lenta?

Hay muchas razones, por supuesto, algunas más personales que otras, pero estas son las

más importantes:

  • El impacto en el medioambiente: la moda rápida genera toneladas de residuos, y además utiliza cantidades enormes tanto de agua como de energía para producirla. Cuando optas por la moda lenta, reduces la huella ecológica.
  • Condiciones de trabajo: generalmente, las marcas de moda rápida se valen de trabajo a bajo costo y en condiciones infrahumanas. La moda lenta está pensada para ser producida en cantidades más pequeñas y con trabajadores locales.

Cómo hacer para abandonar la moda rápida

Si estás buscando pasos a seguir, este es el momento de prestar mayor atención.

1. Examina tu armario ahora mismo 

La idea de la moda lenta no es salir corriendo a comprar ropa nueva y cara. Revisa tu armario primero.

Es muy posible que tengas prendas de buena calidad que ni siquiera recuerdes, así que tu primera tarea es armar maneras creativas de utilizar esa ropa que no te pones tan seguiod.

Además, asegúrate de donar o de vender las prendas que ya no te generen una emoción positiva. Así es como vas en buen camino para ser consciente de tus compras.

2. Recorre tiendas de segunda mano

Las tiendas de segunda mano, los mercados vintage y las aplicaciones de reventa de ropa son excelentes opciones si quieres encontrar ropa a precios accesibles. No olvides chequear la calidad de las prendas antes de comprarlas.

Si compras ropa usada, evitas que esta termine en montañas de basura y contaminando nuestro planeta.

3. Investiga las marcas de moda lenta de tu área

Hay muchas marcas que hoy en día están invirtiendo en moda lenta. Suelen tener mucha transparencia sobre sus procesos de fabricación: utilizan materiales sostenibles y tienen buenas condiciones laborales para sus trabajadores.

Si no tienes opciones en tu área, siempre puedes comprar online. Asegúrate de no caer en el “greenwashing” que realizan algunas marcas grandes: busca hacer una compra pequeña, a consciencia y en marcas independientes.

Usa herramientas como la VPN Surfshark para proteger tus datos y no caer en estafas online, que son muy comunes.

4. Aprende a cuidar tu ropa

Si quieres extender la vida útil de tu ropa, es clave aprender a cuidarla bien. Si es posible, lava menos tus prendas, con agua fría y evitando la secadora siempre que sea posible. También puedes aprender algunos trucos de costura para repararla, en lugar de desecharla.

Bordados simples, parches y puntadas que disimulen roturas son solo algunas de las habilidades que es posible aprender en poco tiempo.

Conclusión

Recuerda tener paciencia, porque salir de la moda rápida no es fácil. Cada paso cuenta. No olvides evaluar lo que tienes, aprender a cuidar tu ropa, comprar de segunda mano y cambiar tu mentalidad para invertir en prendas que te hagan sentir bien y que sean de buena calidad.

Es un compromiso a largo plazo, sí, pero vale la pena realizarlo. Contribuir a un planeta más limpio y a elevar marcas que respeten a sus trabajadores y a su proceso es siempre algo positivo.

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