“Es triste que las ligas duren tan poco”

El último baile del Yosiquesé llega con la música que tocan otros. La última jornada de la fase de clasificación para el ascenso a la LEB Plata depara una enloquecida combinación para dar un par de plazas -el Cazorla ya es campeón y la tiene- en una pelea entre cinco equipos. El cordobés no es uno de ellos, lo que supone una situación inédita en los últimos años para Rafa Sanz y la mayor parte del plantel que ha adiestrado en este curso 17-18. Los leones juegan en Málaga ante el Forus Medacbasket, que en caso de vencer puede meterse en el Top 16 aunque tendrá que esperar favores ajenos.

Al Cordobasket solo le queda defender su orgullo y dignificar el adiós a una temporada y a un equipo que, como tal, termina aquí. Con un balance de 5 victorias y 12 derrotas en el segundo tramo de la competición, el Yosiquesé perdió hace ya muchas semanas la posibilidad de reeditar la clasificación para la fase final que logró en el curso anterior y también la que obtuvo el desaparecido Bball Córdoba en la 15-16 con el propio Sanz y un bloque de jugadores locales que aún siguen juntos.

“La tristeza de acabar ya los entrenos y los partidos nos debe hacer sobreponernos y jugar como equipo los últimos 40’. Es triste que las ligas duren tan poco, pero desde que llegó la crisis los chavales cada día entrenan menos y juegan pocos meses”, ha manifestado Rafa Sanz a través de los canales oficiales del club. El último partido del Yosiquesé será este sábado, a partir de las 19:00 horas, en la cancha del Medacbasket, que tendrá la motivación de un objetivo: marcha quinto, a una victoria de Marbella, Melilla y Almeria (2º, 3º y 4ª). El Yosíquesé aspira a una alegría postrera, una sonrisa para el adiós. “Venimos de un buen partido contra Cazorla y debemos seguir en esa línea. Tenemos que seguir aprovechando la competición para mejorar y crecer. Hasta el final”, señala el técnico del equipo cordobés.

El Medacbasket cuenta con una plantilla de talento, con jugadores formados en la cantera malagueña y una brigada de extranjeros compuesta por los americanos Curtis, Middlebrooks y McGhee que le han dado un salto de calidad competitiva. Al frente está un entrenador cordobés, Manolo Povea, natural de Puente Genil. Con el respaldo de la Fundación Javier Imbroda, el Medac tiene raíces en la localidad costasoleña y está protagonizando la mejor temporada deportiva de su historia. “Ellos tienen buena capacidad, un buen entrenador, una institución solvente detrás. Es un proyecto creciente, pero nosotros no debemos arrugarnos y tenemos que jugar bien, siendo capaces de defender siempre, metamos o no”, dice Sanz en las vísperas del último partido de la temporada. Después llegará el largo desierto de más de cinco meses sin campeonato oficial. Y a ver qué pasa.