El fin de semana del 18 de octubre, nueva fecha de inicio para la Reto Iberdrola

Por fin hay algo claro para Reto Iberdrola, ya que no lo hubo este verano siquiera. A pesar de que, en un principio, el inicio de la competición estaba fechado para el 27 de septiembre, lo cierto es que los equipos de la competición de plata no han podido disputar amistosos de pretemporada y el fin de semana previsto para que rodara el balón no era viable. Además, las jugadoras exigían un protocolo sanitario inmediato para poder empezar la liga de manera segura y, por ende, una fecha exacta para poder planificar los entrenamientos y los partidos de preparación de la nueva campaña. Así, habemus fecha: el fin de semana del 18 de octubre.

El tercer fin de semana del décimo mes del año será la bandera a cuadros de la temporada para los equipos de Reto Iberdrola, tanto CD Pozoalbense como Córdoba Femenino. Aun así, la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) ha especificado un cambio de formato con respecto a la temporada pasada, aunque albergará una similitud: habrá Grupo Norte y Sur. “Los dos grupos existentes (Norte y Sur) se dividen en dos subgrupos cada uno, de 8 y 9 equipos, respectivamente, aplicando el criterio de proximidad geográfica. Los subgrupos A (de 8 equipos) disputarán un total de 14 partidos en 14 jornadas y los subgrupos B (de 9 equipos) jugarán 16 partidos en 18 jornadas”, reza el comunicado de la entidad de Luis Rubiales. Es decir, Pozoalbense y Córdoba Femenino estarán incluidos en el primer subgrupo junto a La Solana (castellano-manchego), Tenerife B y Juan Grande (canarios), Cáceres (extremeño) y Granada y Málaga (andaluces), mientras que el otro subgrupo dependiente del Grupo Sur lo conformarían el Fundación Albacete, el Femarguín, el Valencia B, el Tacuense, el Levante B, el Alhama, el Villarreal, el Joventut Almassora y el Aldaia.

Un rompecabezas similar al de Segunda B

El enrevesamiento de la competición no es ni más ni menos que un reflejo de lo que ha sucedido con la Segunda División B, donde también habría que usar un libro de instrucciones -de los que se usan como pisapapeles- para comprender el funcionamiento de las diferentes categorías. Para la organización en sí del formato de competición, la Federación esgrime en su documento que “la competición se disputará en dos fases, una primera de liga regular y una segunda con etapas específicas. En la segunda, cada uno de los grupos Norte y Sur, los cuatro mejores de cada subgrupo formarán un nuevo conjunto o subgrupo de ascenso (8 equipos), que disputarán el título de Campeón de Grupo”. Para decidir el descenso, la RFEF desarrolla que “el subgrupo de descenso, formado por los restantes, lucharán por la permanencia en Segunda División. Los subgrupos de ascenso y descenso se enfrentarán contra los que no compitieron en la Primera Fase. Para determinar el ascenso o descensos se arrastrará la clasificación de la Primera Fase por coeficientes”.

Esto es, los cuatro mejores de los subgrupos del Grupo Sur (el caso de Pozoalbense y Córdoba Femenino) se meten en otro subgrupo global (están los ocho) para definir el campeón de grupo, que se entiende es el que asciende junto al del otro grupo para cerrar los dos ascensos. Mientras tanto, el subgrupo global de permanencia lo conforman los restantes equipos de los subgrupos de primera fase. En este caso, sería un caso similar al de Segunda B: es decir, los duelos de los cuatro del subgrupo A serían contra los cuatro del subgrupo B (no todos contra todos). Y se arrastra el coeficiente de puntos de la primera fase“. Hasta este punto, es más que comprensible que los lectores no hayan comprendido nada, aunque el paso del tiempo y de la competición podrán dejar más a las claras el funcionamiento. Como apunte adicional, los cambios ascenderán a cinco por equipo ante la situación de pandemia y el número de fichas profesionales en plantilla en Reto Iberdrola llegarán a las seis, por las cuatro que existían hasta la fecha. Ya saben, es el momento de coger el manual de instrucciones y construir el mueble de 120 piezas por uno mismo.