Cambio de planes en la Vuelta a Andalucía: solo llegará a Lucena

Una de las causas que ha provocado las diversas protestas de agricultores que están atizando a la rutina en la sociedad española. Y es que la organización de la Vuelta a Andalucía confirmó la mañana de este 14 de febrero que la primera etapa de esta edición no se iba a celebrar por la falta de agentes de la Guardia Civil para garantizar la seguridad necesaria para que la prueba se celebre con total normalidad. Aun así, este mismo comunicado aseguraba que en las próximas horas se iba a conocer cómo se desarrollaría el resto de la competición hasta que, finalmente, se ha oficializado cuál será el recorrido final.

Tras la reunión entre la organización, jurado técnico y directores de equipos, se ha reducido a tres las etapas de una ronda andaluza que recorrerán: viernes 16 de febrero, contrarreloj en Alcaudete (Jaén), sábado 17, Lucena – Lucena Alto de Nuestra Señora de Araceli en Córdoba y, a la espera de noticias sobre el desarrollo de las protestas se decidirá el recorrido de la última etapa el domingo 18 de febrero, por lo que el pelotón no llegará a Pozoblanco tal y como estaba previsto.

Por tanto, el próximo sábado Lucena disfrutará una etapa que tendrá un recorrido de 100 kilómetros, con un desnivel acumulado de 2000 metros con ascenso al Santuario de Nuestra Señora de Araceli. Este espectacular final fue testigo de la victoria de Alejandro Valverde en 2012, en 2003 de Javier Pascual Llorente y en 1998 de Marcelino García. El circuito urbano en Lucena será en sentido contrario al que estaba previsto en un principio en el recorrido inicial pero con esa dura llegada al Santuario de la Virgen de Araceli.

Aun así y si así lo permite las diferentes manifestaciones, la última etapa se realizará con normalidad, aunque, en busca de contemplar todas las posibilidades, la propia organización admite que existe un plan B en caso de que no se pueda contar con las máximas medidas de seguridad que requiere una prueba de esta categoría.