¿Dos partidos seguidos en El Arcángel? El gafe sigue

El reino califa pierde fuelle ante las citas seguidas. El Córdoba no gana dos partidos consecutivos en El Arcángel desde la temporada 2012-13 donde el cuadro blanquiverde venció a Numancia (1-0) y Murcia (5-0) con Rafa Berges en el banquillo. Una temporada que acabó con Esnaider cogiendo los mandos de un equipo que pasó sin pena ni gloría un curso antes de ascender a Primera División. Por otro lado, hasta siete veces se ha dado la ocasión de que el Córdoba juegue dos veces dos encuentros seguidos en El Arcángel en una sola temporada desde la última campaña en que militó en Segunda B y solo ha conseguido los seis puntos en un par de ocasiones.

Y es que en trece temporadas desde 2007, el conjunto blanquiverde solo ha aprovechado en dos ocasiones la ventaja de tener dos partidos consecutivos en su feudo. En las temporadas 2007-08, 2009-10, 2010-11, 2011-12 y 2012-13 , el Córdoba tenía doble oportunidad, pero solo aprovechó la ya citada con el cordobés en el banquillo, y con Paco Jémez, actual entrenador del Rayo Vallecano, el año del play off donde dirigía a la conocida escuadra comandada por Javi Hervás, Lopez Silva o Borja García. De hecho, esas dos victorias -junto al empate en Vigo- sirvieron para que los califas se metieran en puestos de promoción de ascenso donde fueron eliminados en Zorrilla ante un Valladolid muy superior (3-0).

Por otro lado, a los blanquiverdes se les hace grande El Arcángel con estas oportunidades. Un total de once partidos perdidos, dieciséis empatados y diez ganados en los últimos trece años son las estadísticas del Córdoba cuando juega dos partidos consecutivos a la orilla del Guadalquivir. Con estos resultados, se puede llegar a la conclusión de que en las citas donde los califas deben ser resolutivos y mantener una línea consistente para lograr sus objetivos se desinflan. En un total de 23 partidos de 33, el Córdoba no ha conseguido una victoria que le reafirme en la clasificación. Estadística preocupante y que una temporada más se alargará tras la derrota, tanto pésima como inesperada, ante el Algeciras, rival que no había ganado fuera de casa en lo que va de Liga.