Casi sin ‘nueve’ pero con mucho gol

Agridulce es el sabor. Las sensaciones son positivas, pero el análisis no lo es tanto. El Córdoba arranca la temporada 2018-19 con una muestra de compromiso y valentía, pero también con defectos que corregir. El empate ante el Numancia (3-3) permite de esta forma un análisis muy amplio. Con todo, el encuentro depara datos que resultan más que buenos e incluso alentadores. Cierto es que el conjunto blanquiverde tiene la esencial tarea de mejorar en defensa, pero no lo es menos que goza de capacidad ofensiva. Aun cuando todavía no tiene un referente en ataque. Hablan los números y la historia del cuadro califal, que arranca la Liga con tres dianas a favor después de más de dos décadas. Mucho más atrás en el tiempo hay que acudir para encontrar un inicio similar a éste, en materia anotadora, en Segunda.

El Córdoba encaraba el comienzo del curso con la inquietud de no tener delantero. En realidad, sí lo tuvo. Pero Piovaccari llegó sólo un día antes de recibir al Numancia y no parecía oportuno que, con sólo un entrenamiento a las órdenes de Sandoval, formara parte del once. El técnico hubo de buscar la solución al problema. La respuesta la tuvo en Jovanovic, quien ejerció de punta durante la pretemporada. El serbio demostró que quiere estar tanto para un roto como para un descosido y de su cabeza surgió el que fue primer gol del cuadro califal en la recién iniciada campaña. Después, durante un choque eléctrico por momentos, Javi Lara y Aythami también vieron puerta. No son pocas tres dianas, menos si cabe cuando el nueve apenas jugó unos minutos. Más significativa fue, y es, la cifra si se repasa la trayectoria histórica del club.

La escuadra blanquiverde no estrenaba un campeonato liguero con tres o más goles desde hace más de 20 años. En concreto, tuvieron que pasar casi 23 -a falta sólo de unos días para cumplirse con exactitud- para que el equipo viviera un comienzo tan positivo en materia anotadora. La última vez que lo hizo, antes del pasado sábado, fue en la jornada inaugural de la campaña 1995-96, dato que recordó tras el duelo con el Numancia el compañero de @laligaennumeros, Álvaro Vega. Entonces, el Córdoba militaba en el Grupo IV de Segunda B y estaba dirigido por Pedro Sánchez Pedrito. Los califales abrieron el curso con una notable victoria ante el extinto Lorca Club de Fútbol, al que se impusieron por 3-1. Los autores de los tantos fueron Aitor Bouzo, Algar y Paco Pérez, que permitieron al conjunto cordobesista arrancar como líder. Después el técnico fue relevado por Perico Campos y la posición final fue la cuarta para un plantel del que formaban parte, entre otros, Manolo López y Quero.

Si tiempo hacía que el Córdoba no brillaba en ataque en un inicio de Liga como ocurrió ante el Numancia, más aún si se revisa únicamente su historial en Segunda. En la categoría de plata la espera se prolongó durante casi 44 años. Más de cuatro décadas tuvo que aguardar la afición para ver a su equipo darse un festín anotador en la fecha inaugural de una campaña. El precedente lo sentó aquel conjunto blanquiverde de los Molina, Salas, Rivero o Burguete. Urbano y Escalante también formaban parte de un vestuario dirigido por Vavá y en el que había hasta cuatro argentinos. Eran Dominichi, Juárez, Orife y, por supuesto, Onega. Este último, reconocido a lo largo de los años como uno de los mejores futbolistas de la entidad, fue el encargado de abrir el 3-0 que le endosaron los califales al Tenerife en el debut liguero en aquella ocasión. El triunfo lo completaron Martínez y Rivero.