El Córdoba se ve bien en el espejo

Entre el límite salarial, la rotunda victoria en Albacete, la polivalencia de algunos elementos, las promociones desde el filial y seguramente la conveniencia de dejar algún margen para el mes de enero, por si acaso, el Córdoba encontró un sustento teórico suficiente como para justificar su falta de gasto en el último día del mercado de fichajes veraniego. Pero hubo una incorporación más. A coste cero. El Rayo Vallecano fichó por dos temporadas a Javi Noblejas y lo cedió al cuadro blanquiverde. El lateral izquierdo madrileño se convirtió en la duodécima incorporación del club para la Liga 17-18. Carrión ya tiene a dos jugadores para cada puesto, una situación si no ideal -siempre habrá matices-, sí altamente recomendable para un equipo que se postula como candidato a pelear por entrar en los puestos que dan opción al ascenso. Un objetivo que comparte con más de la mitad de los vecinos de Segunda y que, en el caso de los cordobesistas, se concreta en el clásico “partido a partido” que anunció Carrión. Que cualquiera gana a cualquiera ya es bien sabido. En dos jornadas, todos han puntuado y solo un equipo -el Tenerife- ha ganado los dos encuentros.

No llegó Juan Rafael Fuentes, ilustre parado en este momento -por lo que está libre para fichar en cualquier club que tenga fichas habilitadas-, ni tampoco algún futbolista más de ataque, por lo que Jona Mejía y Sergi Guardiola tendrán que lidiar como nueves puros. Ya dejó dicho Carrión unas horas antes, en su comparecencia ante los periodistas, que estaba “contento” con el grupo y que si llegaba algo tenía que ser de primer nivel. Cosas que se suelen -y se deben- decir cuando uno tiene como trabajo exprimir el talento de un plantel repleto de futbolistas con la etiqueta de apuestas. El frenesí se quedó para otros clubes, que se se lanzaron a por la ganga de última hora con ferocidad. El Córdoba ya tenía los deberes hechos con la llegada de Sasa Jovanovic, que llegó, jugó y marcó su gol en Albacete.

El puesto más señalado como susceptible de refuerzo era sin lugar a dudas el de lateral izquierdo, donde este verano hubo superpoblación. De ahí salieron Domingo Cisma -rescisión de contrato-, Abel Moreno -regreso de cesión y salida al Deportivo Aragón-, Samu de los Reyes -sin equipo aún- y el argentino Bittolo, que ha terminado en el Albacete Balompié. Llegó Dani Pinillos desde el Nottingham Forest, en el que estuvo dos cursos después de ascender a Primera con el Córdoba, y para cualquier eventualidad queda Victor Mena, del filial. Así lo confirmó Carrión, que también apuntó la posibilidad de encajar en el lateral zurdo a Javi Galán o a Josema. Sin embargo, terminó llegando Javi Noblejas, un jugador que se adapta al perfil hambriento que se busca en El Arcángel. El defensa se forjó en las categorías inferiores del Real Madrid y llegó hasta el filial, pero tras su salida de la casa blanca no ha echado raíces en ningún lugar. Pasó por el Getafe, el Elche, el Albacete y el Rayo, que antes de que pisara Vallecas ya le mandó prestado al Córdoba.

Carrión tiene ahora a dos jugadores por posición, lo que le va a permitir rotaciones y una competencia interna que no viene nada mal. Desde la portería a la punta, el técnico catalán dispone de alternativa. En el marco pugnarán el polaco Pawel Kieszek y el serbio Igor Stefanovic, con Marcos Lavín en tercer plano. En la defensa, cuatro centrales: Joao Afonso, Josema, José Antonio Caro y Jordi Ortega, promocionado desde el filial. Para las bandas se quedan Dani Pinillos y Javi Noblejas en la izquierda, con José Manuel Fernández y Loureiro para la derecha. En el centro del campo se concentra el mayor número de supervivientes de la pasada temporada. Ahí están Sergio Aguza, Caballero, Javi Lara, Markovic, Edu Ramos, Álex Vallejo y Esteve Monterde, muchos de ellos con capacidad para cambiar de posición. El Córdoba cuenta con los extremos izquierdos Javi Galán y Jaime Romero, con Alejandro Alfaro y Sasa Jovanovic en la otra banda. Y en la punta, Jona Mejía y Sergi Guardiola. Ahora mismo, salvo los ligeros percances de Alfaro y Esteve, la enfermería está vacía. Pawel acaba de salir. Carrión cuenta con 22 disponibles y no hay agujeros visibles después de la labor de la dirección deportiva, donde debuta Álex Gómez.

El Córdoba se rascó el bolsillo este verano en traspasos, una circunstancia novedosa -durante la etapa de Carlos González sólo se recuerda una cantidad inferior a los cien mil euros por Arturo a La Roda-, y eso le puso en el borde del límite salarial de la LFP. Y ya es bien sabido que en la entidad son muy escrupulosos al respecto. Si el Deportivo hubiese vendido a Florin Andone al Brighton, el club blanquiverde se hubiera embolsado el treinta por ciento del montante del traspaso. La última oferta de los ingleses, rechazada por los gallegos, fue de 18 millones de euros. Al Córdoba hubieran llegado casi seis, lo que no es ninguna broma. Esa operación sigue en la recámara para los blanquiverdes, que darían el pelotazo en el caso de que el internacional rumano saliera traspasado del Depor. Tiene contrato hasta 2021 y una cláusula de rescisión de 30 kilos. Habrá que seguir el tema.