'Manas' convierte a Córdoba en la segunda ciudad de España con un rinoceronte indio
En todo el mundo solo quedan en libertad unos 4.000 ejemplares de rinoceronte indio. El programa de conservación de esta especie en peligro de extinción trabaja con distintos centros zoológicos para lograr la reproducción de la especie y Córdoba se ha convertido en la segunda ciudad de España, tras Benidorm, en albergar un ejemplar de rinoceronte indio. Manas es su nombre -el mismo que el del parque natural donde vive un mayor número de ejemplares en la actualidad-, y ya vive en Córdoba en el recinto que históricamente ocupó la elefanta Flavia.
Manas nació en febrero de 2010 y, a sus catorce años y con 2.100 kilos de peso, ha vivido en Francia -donde nació- y los últimos doce años los ha pasado en Polonia, donde ya ha sido padre y desde donde ahora ha llegado a Córdoba. El recinto que le alberga ha sido adaptado especialmente para este macho de rinoceronte indio, con una piscina, riego en la zona exterior, zona de suelo con ramas para amortiguar su peso y que no se dañe las patas y, en el interior de su cubículo, calefacción.
Con las condiciones requeridas por la coordinación del programa de conservación de esta especia, el Zoo de Córdoba ha dado la bienvenida a esta ejemplar que pasará ahora unos meses de adaptación. Si todo va bien, en tres o cuatro meses, llegará al centro una hembra de rinoceronte indio, con la que comenzar el proceso se reproducción, según ha explicado el director del centro de Conservación Zoo de Córdoba, Antonio Torrecilla.
El objetivo es que, entre los rinocerontes que viven en centros de conservación, se “enriquezca genéticamente la especie”, moviéndolos de un lugar a otro para los apareamientos con distintos ejemplares. “Ahora es el animal de más valor que tiene nuestro centro”, ha añadido su director.
Durante la presentación a los medios, Manas parecía adaptarse a su nuevo hábitat. Con su corpulento cuerpo ha paseado de un sitio a otro del recinto, se ha dado un baño e incluso se ha acercado a los visitantes. Su cuerno se conserva totalmente romo, ya que en esta especie lo utilizan para excarvar y buscar raíces en el suelo, desgastándose así totalmente.
La visita al recinto del rinoceronte está acompaña de la vista de una escultura de José María Serrano, que recuerda cómo en la India le cortan el cuerno con la falsa creencia de que este tiene propiedades medicinales.
0