Ecologistas reclaman al gobierno local medidas para frenar el cambio climático
Ecologistas en Acción ha reclamado al gobierno municipal del Ayuntamiento de Córdoba que desarrolle los compromisos adquiridos por el Pleno en relación con el cambio climático y que ponga en marcha la redacción del Plan Municipal contra el cambio climático al que está obligado por la Ley 8/2018 de medidas frente al Cambio Climático y para la transición hacia un nuevo modelo energético en Andalucía.
En un comunicado, señalan que el informe de 7 de agosto de 2021 del Panel intergubernamental para el Cambio climático advierte de que, “salvo que adoptemos medidas de reducción de gases de efecto invernadero muy decididas”, para mediados de este siglo no solo se habrá superado el umbral de incremento de temperatura de 1’5 ºC fijado como máximo en el Acuerdo de París en el año 2015, sino que incluso para esa fecha, 2050, podría superarse el umbral de +2 ºC fijado como máximo para finales de siglo.
Como detalla este informe, las consecuencias climáticas de este escenario son múltiples y se encadenarán provocando sequías, inundaciones, temperaturas récord en todo el mundo, incremento de las olas de calor (y éstas serán más rigurosas), mayor duración del verano climatológico,… Esta sucesión de eventos climáticos golpeará con mayor rigor al área mediterránea, y en ella, el Valle del Guadalquivir, y especialmente nuestra ciudad, serán especialmente impactados, afirman Ecologistas.
“Nada de esto parece afectar al gobierno municipal, que debería haber puesto en marcha todos sus efectivos para por un lado reducir al máximo las emisiones de gases de efecto invernadero y por otro lado comenzar los procesos de adaptación de los barrios de la ciudad al incremento de temperaturas. Máxime cuando ambos procesos están así determinados, es decir obligan al gobierno municipal según dispone el artículo 15 de la Ley Andaluza de medidas frente al Cambio climático”, critican.
Indican que “el grado de inacción del gobierno municipal es especialmente llamativo” cuando se considera que, el Pleno de la Corporación ha aprobado de forma unánime un buen número de Declaraciones institucionales tanto sobre Cambio climático como sobre Arbolado urbano. Además, “hay un auténtico clamor popular en relación con las medidas que el Ayuntamiento debería estar desarrollando para adaptar nuestra ciudad al inevitable aumento de temperaturas en las próximas décadas, incremento que será especialmente notable en los meses de verano, como estos últimos días estamos constatando”.
Asimismo, señalan que en el marco de la adaptación al incremento de temperaturas, tanto los barrios como las asociaciones vecinales, colectivos ecologistas y otros colectivos sociales, están haciendo especial hincapié en la necesidad de sombrear la ciudad, es decir, evitar el sol directo en todo tipo de espacios, calles, plazas públicas, zonas infantiles, etc, fundamentalmente con la plantación de arbolado (plantemos ahora los árboles que nos darán sombra dentro de 20 años), incremento de la superficie de praderas, instalación de toldos para sombrear donde no sea posible la plantación de árboles, sustitución de superficie impermeable (las llamadas “plazas dura” de pavimento granítico) por superficie permeable y el desarrollo de proyectos de Rehabilitación climática de viviendas, centros escolares y edificios públicos en general.
Ecologistas en Acción entiende que el gobierno municipal tendría que haber elaborado y consensuado con el resto de los grupos municipales un plan de Arbolado urbano en el que se detallen los compromisos de plantación de nuevos ejemplares a largo plazo. Un compromiso de estas características debe ir más allá del estrecho marco de un mandato municipal, y de ahí la necesidad de que dicho Plan sea un compromiso unánime del Pleno. En el mismo deberían figurar, a partir del censo actual de arbolado urbano, el número de ejemplares que el Ayuntamiento plantará a corto, medio y largo plazo, inspirándose para ello en el compromiso de la Unión Europea plasmado en la Estrategia sobre Biodiversidad para 2030, en la que se propone la plantación de tres mil millones de árboles (3.000.000.000) en el periodo 2020-2030, un reto muy difícil de alcanzar, pero que da idea de la magnitud de los recursos que tenemos que emplear para enfrentar la nueva realidad ambiental.
Los eventos climáticos que este verano está soportando el planeta, con incendios de centenares de miles de hectáreas en California, inundaciones en el norte de Europa, temperaturas máximas desconocidas en Canadá, Turquía, Túnez…, y en nuestra propia ciudad, obligan a las personas, a las empresas, a las administraciones públicas y a las instituciones internacionales a multiplicar los esfuerzos para detener las emisiones de gases de efecto invernadero.
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