El Ayuntamiento activa un nuevo proceso para reformar la calle Alfaros en dos meses y que no esté cinco cortada
El Ayuntamiento no reformará la calle Alfaros según el proyecto inicial que había diseñado y que contemplaba un plazo de ejecución de cinco meses. La Delegación de Infraestructuras ha comunicado a Contratación el “desestimiento” de la iniciativa. ¿La razón? La calle Alfaros iba a estar cinco meses cortada al tráfico por su reforma y al tratarse de una vía principal sin alternativa de acceso al centro de la ciudad se considera inviable la obra.
Ante ello, desde el Consistorio aseguran que “se ha iniciado un nuevo procedimiento con el mismo proyecto, en su contenido y memoria, pero se ha cambiado el plazo de ejecución a dos meses”.
La calle Alfaros ya se reformó en 2006. Tiene una particular configuración de la calzada, levantada sobre escombros acumulados desde la época romana y que han llegado a cubrir el precipicio que existía junto al lienzo Este de la muralla. Esta característica y el denso tráfico provocan pequeños movimientos y grietas que llegan a romper las conducciones.
Estas grietas y enormes baches, provocados también por el tránsito de tráfico pesado como los autobuses turísticos o el servicio de Aucorsa, es lo que el Ayuntamiento pretendía arreglar. Para ello se había reservado un presupuesto de 274.625 euros.
El contrato estaba en licitación desde el 4 de abril. De hecho, ya se habían recibido ofertas para hacerse con la obra. Pero todavía no se habían abierto los sobres. El 16 de mayo, Infraestructuras comunicó a Contratación que desistía, por consejo del área de Movilidad del Ayuntamiento de Córdoba. El argumento es el siguiente: “Visto que el plazo previsto en el proyecto de ejecución supondría un corte de tráfico de cinco meses en una de las principales vías de la ciudad que no dispone de itinerario alternativo para el desplazamiento de la ciudadanía en el servicio público de transportes, el Departamento de Proyectos, de conformidad con las recomendaciones del Departamento de Movilidad de este Ayuntamiento, considera inviable la ejecución del proyecto en el plazo establecido”.
Tras el informe de Contratación avalando el desestimiento, el propio concejal de Infraestructuras Miguel Ruiz Madruga firmó el 17 de mayo el decreto para la renuncia para seguir adelante con una obra que pretendía sustituir el pavimento actual por otro de asfalto impreso similar al que ya funciona en el Bulevar del Gran Capitán.
Ahora, el Ayuntamiento dice que “no queda más opción a la Administración que desistir del procedimiento por la incorrecta definición del período de duración de la obra”, al encontrarse por tanto ante “un error no subsanable de las normas que regulan la tramitación del procedimiento de contratación que deben conducir de forma necesaria a la decisión por parte del órgano de contratación de desistir del procedimiento”, que ya ha iniciado de nuevo el Ayuntamiento acortando el plazo de ejecución.
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