Lenta bajada de temperaturas para arrancar octubre

Como una aldea gala rodeada de romanos. El reducto sureño, el que hace del valle del Guadalquivir la envidia de los insensatos que añoran un verano perpetuo, se resiste a hincar la rodilla y presentar rendición a los empujes otoñales que ya han ganado la batalla en casi toda la geografía europea. La resistencia no obstante ve menguar sus fuerzas pasado el equinoccio otoñal, lo que se traduce en menos horas de sol y una incapacidad manifiesta del termómetro de superar la barrera de los 35 °C. Calor suave de verano que quiere tener en la tarde del primero de octubre, un último arrebato con máximas que huelan a estío, antes de sumergirnos, poco a poco, en valores que vayan recordando que el tiempo de las castañas está ya cerca.

Un anticiclón con poco fuelle

La península Ibérica se ha sumergido en octubre bajo dominio anticiclónico, con casi total estabilidad atmosférica, sólo interrumpida por mesobajas superficiales y humedad relativa elevada, que aportan algo de estímulo a las tardes en forma de nubes de tormenta en algunos sistemas serranos. Pero en líneas generales, anticiclón, débil, pero anticiclón y aire cálido concentrado en el sur peninsular.

Pocos cambios en la dinámica atmosférica que tendrá en el lento y progresivo descenso de las temperaturas la nota más destacable para la primera semana del nuevo mes. Desde hoy, el descuelgue de una masa de aire fría hasta el interior del Mediterráneo, va a insuflar algo de aire frío en altura, para rebajar el mercurio del orden de 3 a 4 grados en buena parte del territorio peninsular.

Tiempo estable y temperaturas en progresivo descenso

En el caso de Córdoba, el descenso de las temperaturas empezará a notarse a partir de la próxima madrugada, cuando el role del viento a componente norte consiga barrer el aire en altura y sustituir la masa de aire por otra algo más fresca. Así, si la primera tarde de octubre, Córdoba aspira a poner el termómetro de nuevo en el rango de los 33-34 °C, a partir del martes 2 de octubre las temperaturas podrían empezar a contenerse por debajo de los 30 °C.

Temperaturas que aunque sean elevadas, empezarán a acercarse poco a poco a los valores medios del mes, y que tendrán en las mínimas un poderoso aliado. Si bien las tardes quedarán rondando la treintena, las mañanas verán iniciar el día desde el entorno de los 15 °C. Mínimas que también notarán el descenso y que servirán para situarnos, un poquito más, en el merecido camino a un otoño que nos haga olvidar un verano, que aunque tardó en llegar, no supo despedirse a tiempo.

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