CCOO propone un ERTE si Cajasur no logra los 17 millones de ahorro
La idea busca reducir el ajuste de tres a dos años y elimina la lista de empleados a los que la entidad obligaría a reducir su jornada en caso de no alcanzarse los 425 voluntarios
Comisiones Obreras planteó ayer sus primeras propuestas en el marco de la negociación que los sindicatos y Cajasur han iniciado para decidir cómo encajan el coste de 3,3 millones de euros mensuales que va a suponer la anulación por sentencia judicial de las cláusulas suelo. La idea de CCOO es rechazar dos aspectos que vertebran la ruta trazada por la entidad financiera y que se centra en la reducción de la jornada laboral y los salarios de los empleados.
Por un lado, Comisiones no acepta que la reducción de jornada voluntaria de los empleados de un 50% dure tres años y piden que sea solo de dos años, para no afectar a las prestaciones por desempleo. Por otro lado, este sindicato ve con muy malos ojos la intención de Cajasur de reclutar a voluntarios si no se alcanza un cupo determinado que se acoja a esa reducción de jornada. “No vamos a tolerar que haya una lista de 425 trabajadores a los que se obligue a acogerse voluntariamente”, señala Rafael Navarro, de CCOO.
La alternativa que lanzó Comisiones Obreras parte de esas dos discrepancias y plantea que si, con las modificaciones adecuadas, fracasa el plan de Cajasur (que se completa con un programa voluntario de bajas incentivadas, suspensiones de contrato temporales, reducción salarial temporal y suspensión de aportaciones al plan de pensiones) se puede diseñar un Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) que, en dos años, podría ahorrar unos 20 millones de euros.
El ERTE esbozado por Comisiones plantea una reducción del 10% de la jornada laboral y del salario durante dos años. Además, la empresa se acogería una bonificación del 50% que recoge la ley si se garantiza la estabilidad en el empleo durante los dos años que dure el ERTE y uno más.
La propuesta de Comisiones Obreras será estudiada a lo largo de esta semana por la empresa. UGT se adhirió a la misma, mientras que Aspromonte, sindicato mayoritario, la rechazó de plano.
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