Una historia de Esperanza

La hermandad de San Andrés inaugura la muestra conmemorativa de su 75 aniversario fundacional en San Felipe Neri | Bajo el título “Iconografía Mariana. La Esperanza”, la exposición recoge importantes elementos del patrimonio de la cofradía

Apenas atravesadas las puertas del edificio, atrae la mirada del visitante una de las muchas obras que para la hermandad realizara el insigne Juan Martínez Cerrillo. Se trata del antiguo paso procesional de Nuestro Padre Jesús de las Penas, una obra que tanto por su peculiaridad y belleza como por formar parte de la memoria tan sólo de los más veteranos guarda una especial fuerza de atracción al cofrade. Es, por decirlo de alguna manera, la carta de presentación, la gran bienvenida, de una muestra de gran valor y significado, ya sea por lo que muestra como por el motivo que lleva a que tenga lugar. Este viernes el antiguo Oratorio de San Felipe Neri acogió la inauguración de la esperada exposición “Iconografía Mariana. La Esperanza”, que organiza la cofradía homónima dentro de los actos conmemorativos del 75 aniversario de su fundación.

En un escenario único como lo es el rehabilitado Oratorio de San Felipe Neri, la corporación de San Andrés muestra “lo que es en sí la cofradía, desde sus orígenes al paso único de Martínez Cerrillo y sus elementos más significativos”, tal y como señala el hermano mayor de la Esperanza. Javier Baena apunta que la muestra “es algo diferente, es enseñar lo que tenemos, mucho o poco, con mucho gusto a los cordobeses”. No es escaso precisamente el patrimonio de la hermandad, que permite al cofrade y al visitante realizar un muy cuidado recorrido por su historia gracias a la intervención de quien es su comisario, Rafael Mariscal Martínez. Él fue el encargado de explicar en los primeros instantes de la exposición el modo en el que está trazado el camino.

Si bien la mirada se dirige enseguida, tanto por su ubicación en la sala como por la riqueza artística del conjunto, al paso de guadamecíes de Nuestro Padre Jesús de las Penas, el viaje por los 75 años de historia de la corporación radicada en San Andrés tiene su inicio en la figura de Juan Martínez Cerrillo. Un pequeño taller, en uno de los laterales del antiguo Oratorio de San Felipe Neri, muestra algunos de los útiles con los que trabajara el bujalanceño, autor no sólo de las imágenes del Señor y de María Santísima de la Esperanza sino también de parte importante del patrimonio de la hermandad. Como una pieza de la antigua bambalina del paso de palio, realizada en 1951. Ese año queda recogido en la segunda etapa de la exposición, que ubica al cofrade y al visitante en el período que va de 1939, año de los primeros pasos hacia la creación de la cofradía, hasta 1977, una época conocida como de Santa Marina por ser éste el barrio que acogiera a la hermandad en sus inicios.

Diversos documentos de mayor o menor antigüedad, un capote en seda blanca, lentejuelas y oro fino donado por Juan Serrano Finito de Córdoba este mismo año o fotografías que evocan otros tiempos acompañan a diferentes sayas de María Santísima de la Esperanza o diversos estandartes, que rodean al palio de la imagen que tallara Juan Martínez Cerrillo. Sobre el paso lucen las vestiduras de la Virgen. La otra etapa histórica, ya en el período en San Andrés, marcha entre 1977 y el actual 2015 y recoge las piezas del canasto del paso de misterio, cuyas imágenes secundarias también se encuentran en la muestra. Asimismo, las fotografías muestran el transcurso del tiempo también en la hermandad. La exposición, completa y realizada de manera cuidadosa y delicada, también ilustra el inicio de la Banda de Música María Santísima de la Esperanza. Además, la corporación enseña tres tallas marianas, bajo su misma advocación, del siglo XVIII en lo que asemeja un altar de cultos.

En definitiva, se trata de un recorrido por la historia de una corporación que va camino de despedir un año realmente especial; el año en que conmemora el 75 aniversario de su fundación y que terminará con un balance “muy positivo”. “Hemos tenido muchos actos y un respaldo muy grande por parte del pueblo de Córdoba”, indica el hermano mayor de la Esperanza. La única lástima, que no pudiera tener lugar la salida extraordinaria con destino en la Mezquita-Catedral debido a la lluvia. “Esa espinita no se va a quitar, porque pienso que hubiera sido cumbre”, afirma Javier Baena al tiempo que resalta lo positivo del pasado 17 de octubre: “Me quedo con la madurez que tuvo la cofradía y con el acto de la Catedral, pues tenía el temor de que no hubiera mucha gente y estaba llena”. “Para mí es como si hubiéramos salido”, concluye en ese sentido.

Una joya en San Felipe Neri

Uno de los elementos más destacados, si no el más, de la muestra es el conocido como el paso de guadamecíes de Nuestro Padre Jesús de las Penas. Hasta el 8 de noviembre, en horario de 11:00 a 14:00 por la mañana y de 17:00 a 21:00 por la tarde, quienes se aproximen a la exposición tendrán la oportunidad de disfrutar de una obra única. Porque el San Felipe Neri acoge, entre el rico patrimonio de la hermandad de la Esperanza, el antiguo trono procesional de su titular. Obra de Juan Martínez Cerrillo, presenta una hechura que comparte dos técnicas: por un lado, el cordobán -sobre plata- y por otro, como el propio nombre por el que se reconoce a este conjunto, el guadamecí -cuero en crudo-. Se trata de una valiosa parte de la historia de la cofradía de San Andrés y de la Semana Santa de Córdoba.

De entre los detalles de este rico elemento de la Esperanza sobresalen precisamente las tablas de madera recubiertas de guadamecíes policromados, pues ninguna de éstas ofrece una representación igual. Todas son diferentes. También resulta notable a nivel histórico la forma en la que la corporación de San Andrés llevó a cabo la ejecución del paso. Éste fue costeado gracias a la aparición del Señor de las Penas -sobre el paso del Santísimo Cristo de la Expiración- en la película ítalo española Soledad, de la que algunas escenas fueron rodadas en Córdoba allá por 1958. Un año después, Martínez Cerrillo completó un conjunto único sobre el que realizó su salida la imagen hasta 1989 y que estos días podrán ver de cerca todos cuantos se acerquen a la exposición “Iconografía Mariana. La Esperanza” en San Felipe Neri.