El Villarreal impone sus normas en Pozoblanco

El submarino amarillo aplicó su ley en el Municipal de Pozoblanco. En el marco del duelo entre los dos primeros clasificados del grupo de ascenso a Liga Iberdrola, aunque con mayor ventaja para las visitantes en puntuación, se daban cita Villarreal y Pozoalbense, aunque las que se marcharon con más alegría fueron las castellonenses. El dominio fue incontestable por parte del cuadro amarillo, que sobrevivió a base de superioridad con el balón y de dejar muy alto el nivel de rentabilidad goleadora, aprovechando también los contraataques. Así, las de Sara Monforte son virtualmente ascendidas del Grupo Sur tras su triunfo en Los Pedroches, mientras que las locales tratarán de, en el resto de competición, terminar en la mejor posición posible.

El guion era de claro dominio amarillo y verticalidad blanquilla. Con la ausencia principal de Karla Riley en el Pozoalbense por su reciente convocatoria con la selección de Panamá, la dupla atacante perteneció a Farlyn Caicedo y María Marín; por su parte, la lesión en el calentamiento del Villarreal de Sara Medina obligó a la entrenadora Sara Monforte a sustituirla en el once por Cris Díaz. También este encuentro, además del duelo entre los dos primeros clasificados, significó el regreso de Olivia Oprea a Pozoblanco, donde disputó la pasada campaña. Salma Paralluelo, internacional española en categorías inferiores, tuvo la primera ocasión desde el costado zurdo, con un potente disparo que despejó Ana Murga a saque de esquina. A pesar de los continuos acercamientos del Villarreal, el Pozoalbense también causó peligro a través del juego directo e incluso Farlyn Caicedo estuvo a punto de inaugurar el electrónico, pero una gran intervención de Elena De Toro y la posición antirreglamentaria de la colombiana acabaron por frustrar su intento.

Sin embargo, un chispazo castellonense se impondría. Salma recibió al espacio y, ante la salida ante Murga, levantó el balón con suavidad sobre la cabeza de la meta, pinchó el esférico y definió de volea a placer. No en vano es uno de los mayores talentos jóvenes a nivel nacional, haciendo gala de su velocidad punta y su calidad en poco espacio de tiempo. Rival de la atleta Carmen Avilés sobre las pistas, verdugo del Villarreal antes del ecuador de la primera parte. El cuadro de Sara Monforte siguió cómodo sobre el césped del Municipal de Pozoblanco, aunque la rapidez de las bandas blanquillas podían percutir con peligro en cualquier momento, ya fuera a través de Farlyn Caicedo o de Bruna Tavares. Sin embargo, la alerta amarilla seguía vigente y en cualquier momento podía aplicar su ley. Salma, en un libre directo desde 30 metros, a punto estuvo de quitar las telarañas de la esquina superior derecha, pero Ana Murga voló sin motor para despejar el cuero a saque de esquina. La respuesta pozoalbense llegó minutos después, con una valiente internada de Loba por banda izquierda que culminó Marín a las manos de Elena De Toro. La propia ex cordobesista sería la autora de un potente disparo lejano que, de nuevo, la cancerbera del Villarreal se encargó de alejar de su meta.

Tras el tiempo de descanso, la velocidad del submarino amarillo se hizo notar y Salma robó la cartera a Rocío, metió la quinta marcha y cedió para la entrada por el centro de Sheila, que sólo tuvo que empujar ante la presencia de una zaguera blanquilla bajo los palos. Después del golpe, el Pozoalbense intentaba recomponerse a pesar del dominio castellonense e incluso Ayaka pudo reducir la diferencia en el marcador con un disparo que despejó De Toro. En medio de un carrusel de cambios alargado en varios minutos, las de Sara Monforte continuaron con la superioridad con el cuero, con su guardameta bajo poca amenaza desde el equipo pedrocheño. Así, el triunfo final del Villarreal acerca a éstas al ascenso matemático, mientras que el Pozoalbense consuma su tercera derrota en tres partidos en esta fase y desciende hasta el cuarto puesto del grupo de ascenso, a falta de que se igualen los encuentros al final.